El pionero del rock & roll Bo Diddley ya trató el tema en 1958.
De la Grecia Clásica viene la expresión
‘Gnothi seautón’, que viene a significar ‘conócete a ti mismo’ y que, repetida
infinidad de veces, ha mantenido su vigencia a lo largo de los siglos. Y ello
porque es extremadamente difícil conocerse a sí mismo, analizarse, pensarse, mirarse,
criticarse e incluso reírse de sí mismo. Aun así, hay canciones en clave rock
que tratan este filosófico asunto: el clásico ‘Before you accuse me (take a
look at yoursef)’ y el más heavy ‘Look at yourself’
Generalmente resulta muy fácil ver los
defectos de los demás sin dar importancia a los propios. Es una especie de
vicio muy extendido en el mundo y en el tiempo: se echa en cara al otro la paja
que tiene en su ojo sin atender a la viga que hay en el propio, y sucede por
cualquier cosa: política, dinero, fútbol. Por eso los filósofos griegos decían
que hay que mirarse a uno mismo antes de juzgar al otro. La música rock, que
siempre trata de expresar sentimientos, emociones o situaciones, también ha
sabido mostrar lo difícil que resulta mirarse a uno mismo. Los más sonados
títulos que tratan este tema podrían ser el sensacional y pionero ‘Before you
accuse me’ de Bo Diddley (publicado en 1958) y el potente ‘Look at yourself’
(1971) de Uriah Heep.
El pionero del rock & roll Bo
Diddley lanzó su inmortal ‘Antes de acusarme (mírate a ti mismo)’ en 1958.
Entre las muchas veces que ha sido revisada sobresalen las versiones de los
Creedence y de Eric Clapton, pero la original tiene ese encanto del rythm &
blues que inconscientemente muta hacia el rock. La letra es totalmente
explícita: “Dices que he estado gastando mi dinero en otras mujeres, pero tú
has estado saliendo con alguien más. Antes de acusarme mírate a ti misma (…)
Ahora dices que he comprado ropa para otras, pero tú has estado trincando
dinero de otras personas”. Es decir, el protagonista del texto le pide a su
pareja que no acuse tanto porque tiene tanto que reprocharse como él. Sin
embargo, al final el acusado se rinde con un “vuelve a casa nena”. Cuentan que
John Fogerty no eligió por casualidad versionar este tema para su Lp ‘Cosmo´s
Factory’ (1970); el grupo vivía momentos de tensión extrema, puesto que los
otros tres querían meter mano en la composición (el autor cobra más), aunque ha
quedado demostrado que sólo las piezas de John Fogerty tienen esa chispa que las
distingue; así, al optar por grabarla, John parecía decirles a sus compañeros:
“antes de acusarme y exigirme miraos a vosotros y considerad vuestro talento,
vuestra aportación, vuestros resultados”. Y se lo dijo mediante esta canción,
aunque no dio resultado y un par de años después grabaron su último y peor Lp,
que contenía composiciones del bajista y el batería; tras la desbandada, seguro
que entonces los otros le hicieron caso y se miraron a sí mismos… Ya sea la
original o la de los Creedence, resulta muy reconfortante volver a escucharla.
La otra canción que lanza el imperativo
‘mírate a ti mismo’ es el ‘Look at yourself’ que el grupo británico Uriah Heep (una
de las mejores bandas de heavy-hard de la historia) editó en 1971; la portada
del Lp, de idéntico título, es como un espejo en el que mirarse a uno mismo. Su
autor, Ken Hensely, teclista, guitarrista y voz (murió en Alicante hace un par
de años), explicaba que la canción se refería a sí mismo en un momento en que
no sabía por dónde ir, tanto en su vida personal como en su carrera profesional;
trataba de mirarse a sí mismo, a su interior, para hallar respuestas. Ese
ejercicio de auto análisis es el que subyace en el mensaje de la canción y es
perfectamente válido para todos. La letra dice: “Te veo corriendo y no sé de
qué estás huyendo (…) Mira hacia atrás y verás que nadie viene”, versos en los
que explica que es inútil huir de uno mismo, y por eso recomienda “Mírate a ti
mismo, no tengas miedo”; y termina “Si necesitas ayuda no te escondas, sólo
mírate, mírate a ti mismo”. El poderoso sonido (esa combinación de guitarra y
teclado resulta apabullante) y la magnífica voz de David Byron completan una
pieza magistral desde cualquier punto de vista. Dicho sea de paso, en el Lp la
voz es la de Hensley, pues Byron estaba entonces enfermo, pero éste la cantó
siempre en vivo.
Antes de increpar, juzgar o despreciar
al de al lado, es preciso mirarse a uno mismo, y se puede hacer escuchando el
mejor rock & roll.
CARLOS DEL RIEGO
No hay comentarios:
Publicar un comentario