miércoles, 29 de marzo de 2017

LOS CRONISTAS DE INDIAS ENJUICIAN A BARTOLOMÉ DE LAS CASAS, Y NO SALE BIEN PARADO. Parece comprobado que el origen de la leyenda negra contra España está en la obra de Bartolomé de las Casas, tenida por exacta por gobiernos y ciudadanos; sin embargo, otros cronistas de Indias lo desdicen e incluso desvelan cómo era aquel fraile.

Fray Bartolomé de las Casas, según él mismo, exageró, y según otros cronistas, no era tan recto como presumía.
La obra ‘Brevísima relación de la destrucción de las Indias’, publicada en 1552, fue la base de eso que se llama la leyenda negra; el dominico fray Bartolomé de las Casas la escribió buscando la defensa del indio, siendo notorios sus esfuerzos y desvelos en favor de los indígenas americanos… Pero la cosa no está tan clara si se investiga y se analiza lo que sus colegas, los cronistas de Indias contemporáneos suyos, han dejado escrito acerca de sus virtudes como historiador y como persona. Y no sale bien parado de esos testimonios. No se trata de las exageraciones que contiene ese libro (el propio fray Bartolomé reconoce que exageró para llamar la atención), como la de que en la isla la Española vivían quince millones de indios (¿cómo llegaría hasta esa cifra?) y que estaba surcada por más de treinta mil ríos (¿); ni tampoco se trata de revisar las contradicciones en que cae, como cuando señala que al ir costeando la isla de Cuba no se vieron indicios de presencia humana (o sea, estaba escasamente poblada) para años después olvidarse de lo dicho y denunciar que los españoles mataron a doce millones de indios (lo que indicaría que estaba muy poblada); también es contradictorio e incoherente que pidiera al emperador Carlos que, para aliviar el esfuerzo de los indios, se trajeran negros de África (luego rectificó, pero ya le habían hecho caso), o de que clamó contra la esclavitud de los indios pero no dijo ni una palabra de la existencia de esclavos en España y en toda Europa para, después, no mostrar la mínima atención a los barcos portugueses cargados de africanos que llegaban a América. Ni siquiera se trata de demostrar sus groseros errores, como describir a los indios como “mansos, buenos” cuando se sabe que eran sociedades tremendamente violentas y sanguinarias. Se trata, en fin, de revisar qué es lo que decían de él sus colegas, los otros cronistas de Indias que vivieron aquella aventura.

El asturiano Gonzalo Fernández de Oviedo (1478-1557), que gozó del don de la oportunidad y presenció hechos de enorme trascendencia histórica, se convirtió en uno de sus enemigos al dejar constancia escrita de la catástrofe en la que desembocó la idea de Las Casas de colonizar pacíficamente. La cosa fue más o menos así: el fraile indigenista reclutó a trescientos españoles para que ocuparan un territorio en la actual Venezuela, se casaran con nativas y labraran la tierra; pero al llegar se encontraron con que ya había allí españoles que incluso habían fundado un pueblo (le llamaron Toledo), entonces el “colérico clérigo” (como él mismo se define) les ordena que se vayan inmediatamente, a lo que se niegan; el fraile dice que va a Santo Domingo a presentar la reclamación ante las autoridades, y le acompañan los españoles que estaban antes, dejando solos a los recién llegados que, al poco, fueron exterminados por los indios. El caso es que Oviedo dio a conocer el hecho, e incluso explica que Bartolomé se encerró en un convento en La Española, de donde salió ordenado para evitar dar explicaciones sobre el asunto. Por esto, Las Casas convirtió a Oviedo en uno de sus principales enemigos.

Después, López de Gómara (cuya obra se basa en la de otros, pues nunca estuvo en América y no conoció a ningún protagonista de la conquista, ni siquiera a Cortés, en contra de lo que se lee en Wikipeda), se hizo eco de la historia de los labradores muertos por los indios, de modo que también entró en la lista negra de fray Barolomé. Éste lo acusó de haber escrito al dictado de Cortés cuando vivió en su casa; sin embargo, Gómara nunca dice que Cortés le contó esto o aquello, y eso a pesar de que todo historiador busca la propia credibilidad destacando que recibe sus informaciones de primera mano, de modo que el soriano Francisco López de Gómara (1511-1566) hubiera estado encantado de escribir  “esto me lo dijo el propio Hernán Cortés”, cosa que nunca hizo porque nunca lo tuvo delante.

Pero tal vez sea Fray Toribio de Paredes (1482-1569) quien más detalladamente describe a Las Casas. Este fraile zamorano (de Benavente) adoptó, al llegar a México, el nombre de Motolinia, que en náhuatl significa pobreza, haciendo honor a tal apodo durante toda su vida. Éste cuenta que, en 1539, “con unos poquillos cánones que el de Las Casas oyó, él se atreve a mucho, y muy grande parece su desorden y poca su humildad”, y añade “porque él procuró saber sino lo malo y no lo bueno, ni tuvo sosiego en esta Nueva España, ni aprendió lengua de indios, ni se humilló ni aplicó a les enseñar”. En una carta a Carlos I en 1555 Motolinia denuncia la conducta de Las Casas y lo tacha de hipócrita que predica una cosa y hace otra muy distinta, que al llegar a Tlaxcala traía “de veintisiete a treintaisiete indios” para que le cargasen su equipaje y que no les pagaba por su trabajo; de hecho, cuando Las Casas se negó a bautizar a un indio que había llegado de muy lejos para tal fin, Motolinia le dijo: “padre, todos vuestros celos y amor que decís que tenéis a los indios se acaba en traerlos cargados (…) que solo vuestra caridad traéis cargados más indios que treinta frailes”… Teniendo en cuenta que siempre, invariablemente, todos los que lo conocieron y mencionan afirman que era de una integridad y honestidad a toda prueba, resulta difícil no creer a Toribio de Paredes, Motolinia.

Asimismo, Bernal Díaz del Castillo (en torno a 1492-1584) desdice y niega varias veces las afirmaciones de Bartolomé de las Casas (quien también fue encomendero e incluso llegó a obispo) con muy sólidos argumentos, pero mostrando siempre un gran respeto. En realidad, casi todos los cronistas de Indias que hablan del “clérigo colérico” lo tachan de soberbio, aprovechado, exagerado, incoherente y tendente a la rabia. Y ello a pesar de que en la corte española siempre le hicieron caso: Carlos I promulgó a instancias suyas en 1542 las ‘Leyes Nuevas’ para “el buen tratamiento y conservación de los indios” (como ya había hecho su abuelo Fernando de Aragón en 1512 con las Leyes de Burgos). Cisneros y otros altos cargos eclesiásticos enviaron a América, tras escuchar a Las Casas, varios frailes para que velaran por el bienestar del indio; dicho sea de paso, fray Bartolomé escribe que se le nombró Defensor y procurador universal de todos los indios, sin embargo, de este nombramiento no hay ni rastro en los archivos y ningún otro autor hace la más mínima mención de tal cargo. Asimismo, se organizó en 1550 un gran debate en torno al asunto de los indígenas, la ‘Junta (o Controversia) de Valladolid’. Es decir, sus denuncias no sólo fueron escuchadas, si no que se tuvieron muy en cuenta para combatir los abusos.

Viendo las cosas en perspectiva, sorprende que un autor tan cuestionado por sus colegas y de quien hay tantos testimonios adversos haya sido la base de algo tan duradero como la leyenda negra, la cual sigue siendo admitida por muchos, sobre todo españoles.


CARLOS DEL RIEGO

domingo, 26 de marzo de 2017

EL ESCASO INTERÉS DEL ROCK POR LA IDEA DE UNA EUROPA UNIDA. La Unión Europea cumple sesenta años, más o menos los mismos que el rock & roll en este continente; sin embargo, pocas veces han coincidido, pocas veces se han fijado los grupos de rock en la vieja Europa: la cosa no les interesa demasiado.

The Clash, que a menudo protestaban contra la sociedad occidental, escribieron tras regresar de Jamaica el tema 'A salvo en el hogar europeo' (foto Bob Gruen).

Esa idea de una Europa Unida no es nueva. Primero los romanos, después Carlomagno, más tarde Carlos I y luego Napoleón soñaron con unificar el viejo continente, utilizando como elemento aglutinante la administración, la política, la religión..., sí, la vieja Europa tiene mucho que contar. El caso es que ese proyecto que persigue algo así como unos Estados Unidos de Europa puso sus cimientos hace justo sesenta años, en 1957, coincidiendo con la aparición de los primeros músicos de rock cien por cien europeos, un honor que podría corresponder a los británicos Billy Fury, Cliff Richard y, claro, The Quarrymen. Pero a pesar de que el europeísmo y los balbuceos de ese género musical son más o menos de la misma quinta, pocas veces han cruzado sus caminos, de manera que los autores de canciones, al igual que la mayoría de la población, han prestado escasa atención a esta empresa. Aún así, se pueden encontrar algunas piezas que merece la pena recordar.

Aunque en algún lugar entre los Urales y el Atlántico alguien escribiera una canción sobre este asunto antes, entre los grupos con significado internacional seguramente sean Roxy Music quienes primero se decidieron a hacer algo relacionado (aunque fuera mínimamente) con la vieja Europa. Fue en 1973, en su álbum ‘Stranded’, cuando editaron ‘A song for Europe’. Una balada, ¡cómo no!, fina y elegante, con un Bryan Ferry entonando, como un lamento nostálgico y desde algunas ciudades de Europa, cosas como “No tenemos nada que compartir, excepto el ayer”, y para mostrar un matiz intercontinental incluso se atreve con el francés y hasta con el latín…       

Contrastando con la calidez y pasión de Ferry y sus huestes, los germanos Kraftwerk, siempre gélidos, invitaron a todo el mundo en 1977 a dar un paseo en su ‘Trans Europe Express’. Sonido frío, mecánico, voces casi átonas, repetición uniforme e invariable… como el ruido del tren en marcha. Sin embargo, la pieza posee un evidente espíritu europeísta que se basa en la idea de que el ferrocarril une países. La letra tiene poca chica: habla de los Campos Elíseos, de un café en Viena y de un encuentro con Bowie e Iggy Pop en Dusseldorf, eso es todo. Claro que su valor está en la innovación, en el descubrimiento del techno.

Primerizos eran REM cuando lanzaron su ‘Radio Free Europe’, donde Europa sólo aparece en el título. El ambiente ligero, ágil, con que acompañaban a la melodía resultaba fresco en aquel 1981; fue su primer single y con él el grupo se dio a conocer en todo el mundo. El texto es indescifrable, algo muy corriente en los que escribe su cantante, Michael Stipes, quien parece hacerlos pensando más en su buen encaje en la música que en decir algo coherente, además, se cuenta que en los primeros conciertos incluso improvisaba.

Por aquellos años, en 1978, The Clash hervía en el cráter del punk. Su segundo Lp se abría con ‘Safe European Home’, un cañonazo guitarrero que invitaba a bailar ‘pogo’ (eso de bailar saltando y empujando al vecino). La letra está cargada de intención; cuentan Strummer y Jones que habían pasado una temporadita en Jamaica para componer canciones (Simonon echaba chispas por no haber sido invitado), pero el viaje resultó… peligroso; ellos mismos declararon con total crudeza cosas como que “ser blanco allí es una invitación al robo”, o “es extraño que no termináramos en filetes con patatas”, o como “si en los muelles sobrevivimos fue porque debieron confundirnos con marineros”. No sorprenderá que sólo al volver a casa, sólo al pisar Europa, se sintieran verdaderamente a salvo. Y es que como en casa… Lo curioso del asunto es que las canciones de The Clash solían contener puyazos contra la sociedad burguesa occidental, por lo que llama la atención su repentino apego a su ‘despreciada’ tierra y su sentimiento de alivio al regresar a ella.  

The Stranglers también fueron punk en su momento, pero con el tiempo derivaron en una banda de sonido poco ruidoso, racional, tranquilo y muy elegante. Así es su ‘Feline’ (1983), que incluye uno de sus temas más celebrados, ‘European female’. La voz va susurrando a través de un acompañamiento en el que sobresalen la guitarra acústica y el bajo, con sutiles arreglos de teclados varios, todo lo cual proporciona un entorno muy refinado, casi decadente. El texto es un poético elogio de la mujer europea, con versos con tanta lírica como “cuando habla, sus labios besan el aire (…) me encanta su aire y su gracia, aquí está la mujer europea, vamos a estar juntos durante mil años”.

Hay algunas más, eso sí, pocas y con escaso alcance. No, el tema de Europa como unidad no parece haber estimulado la imaginación de los compositores de canciones rock. Sorprende un poco que una idea de unión como la que propone la U. E., con todos sus defectos, no termine de prender en el ideario del rock y géneros afines. Tal vez en el futuro.


CARLOS DEL RIEGO

miércoles, 22 de marzo de 2017

LA PERVERSIÓN DE LOS PARTIDOS POLÍTICOS. Los partidos políticos son una herramienta necesaria para el buen funcionamiento de la democracia, sin embargo, en España (y en casi todas partes) han convertido el beneficio del partido en su principal objetivo, olvidando que están ahí para buscar el bien común.

Cuando los dirigentes de los partidos políticos no atienden a razones se vuelven irracionales, y sólo buscarán la destrucción del rival.
Los partidos políticos en España han dejado de tener el bien común como objetivo prioritario (si es que alguna vez fue así), de manera que son los intereses políticos partidistas los que deciden el camino a seguir, los que determinan cuál será la posición a tomar; dicho de otro modo, la condición ‘sine qua non’ que tienen todas las agrupaciones políticas a la hora de aceptar o rechazar una propuesta es el bien del partido, la conveniencia política, quedando muy relegado el beneficio de la población. Tal cosa se demuestra en España de modo irrefutable revisando la actuación de los parlamentarios de la oposición, los cuales desaprueban sistemáticamente cualquier propuesta del partido de gobierno (que, dicho sea de paso, actuó y actuará de modo idéntico) sin atender a la conveniencia del país; al contrario: pretenden dañarlo a través de los ciudadanos.

Es como el marido maltratador que quiere hacer daño a la mujer pegando una paliza a los hijos. Tal es lo que hacen los que se posicionaron en contra de la ley que, impuesta por la Unión Europea, trata de actualizar la situación del sector de la estiba (los que cargan y descargan los barcos). Lo incoherente es que, si estuviera en el poder cualquiera de esos dos partidos, sin la menor duda exigirían al parlamento el cumplimiento de la legislación europea. Queda demostrado que a los políticos que han votado en contra de la ley no les importa que haya que pagar una multa diaria, puesto que el dinero saldrá de todos los españoles… Muy distinto sería si fueran los diputados (el Senado es un costoso cero a la izquierda) quienes corrieran con ese gasto; se puede hacer una sencilla cuenta: hay 350 asalariados en el Congreso y la multa es de 134.000 euros al día, por lo que si la tuvieran que abonar los verdaderos responsables del desaguisado (los políticos) saldrían a unos 383 pavos cada uno cada día…, en dos minutos se pondrían de acuerdo y en tres estaría resuelto el problema. Hay que recordar, asimismo, que la sanción por no haber solucionado a tiempo el asunto, en 2014, venía siendo de unos 22.500 euros al día, que deberían haber pagado los diputados del partido gobernante. Por otra parte, otras proposiciones necesarias para el país también le son negadas al gobierno con el fin de perjudicar al partido que lo sustenta; así, no hace mucho, el principal partido de la oposición declaró que votaría en contra de los presupuestos…, a pesar de que ni siquiera se habían redactado ni, evidentemente, presentado; es decir, les importaba un rábano lo que contuviera esa previsión de ingresos y gastos, siempre la rechazarían por venir de quien venía y porque apoyar al rival político, aunque sea en beneficio de todos, va contra su ideario político: el partido por encima de todo y de todos.

Luego está el asunto que ha provocado la cosa, los trabajadores de los puertos, los estibadores. Sin conocer la problemática a fondo (cosa que pocos controlarán), resulta sorprendente que hayan rechazado ofertas irrechazables, como prejubilaciones a los cincuenta con sueldo de ministro; así, cabe preguntarse ¿qué será aquello a lo que no quieren renunciar que vale más que esas suculentas condiciones?, ¿quién rehusaría aceptarlas?  Es preciso no olvidar que la ley promulgada por la Unión Europea sólo trata de liberalizar el sector, y liberalizar es lo contrario de monopolizar; es decir, el Parlamento Europeo no se mete en temas como pagas o derechos, sino que sólo pretende que ese sea un mercado libre.

En fin, aunque parezca innecesario, es preciso recordar que los políticos son empleados de los ciudadanos, asalariados a quienes la población ha puesto ahí para buscar y encontrar soluciones, no para entorpecer la labor de quien las busca; así, si no se está de acuerdo se hacen las propuestas oportunas y se señalan condiciones, modificaciones, mejoras… pero no parece razonable ni constructivo limitarse a negar y echar abajo por sistema, porque interesa al partido. No están ahí para destrozarse unos a otros utilizando conflictos y sucesos como armamento.

Todo esto sucede porque los políticos llevan demasiado tiempo en política, y muchos de ellos no se han dedicado a otra actividad en su vida, de manera que han convertido la política en su única meta. Y eso sin contar con constantes como el trinque, el amiguismo, la comisión-mordida, el fraude…


CARLOS DEL RIEGO

domingo, 19 de marzo de 2017

CANCIONES IRLANDESAS PATRIMONIO MUNDIAL En torno al Día de San Patricio la verde Irlanda se hace presente en muchos lugares del mundo, donde la gente luce todo tipo de prendas verdes. Buen pretexto para recordar a las más importantes figuras del rock que Eire ha exportado. (NOTA: ha muerto Chuck Berry).

Phil Lynot (Thin Lizzy) y Rory Gallagher, dos de las máximas aportaciones irlandesas a la causa del rock.

Gritones y con el vaso de güisqui o cerveza en la mano, impulsivos, religiosos y siempre dispuestos a cantar a voz en grito canciones tradicionales…, seguro que hay muchos irlandeses así pero, como en todas partes, habrá de todo. Sea como sea, cuando llega el día de su patrón se nota. En cuanto a música se refiere, la mayor aportación irlandesa es la música celta, pues de allí son algunos de los máximos exponentes de tan emblemático género, el cual ha conseguido invadir otros estilos, abrirse paso en las listas y contagiado a grupos de lugares lejanos a la cultura céltica; The Chieftains o The Dubliners están ya en el plano de la leyenda de la música tradicional irlandesa. Pero además, la isla ha aportado excelentes artistas al mundo del rock. Sin pensar demasiado, cualquiera interesado en este asunto diría de inmediato Van Morrison y U 2, y pensando un poco mencionaría a Thin Lizzy y Rory Gallaguer, claro que los más enterados podrían señalar quince o veinte más. Sí, en Irlanda se ha hecho siempre muy buen rock, y algunos de sus músicos han influido poderosamente a otros en otras partes del planeta. Si hubiera que quedarse sólo con cinco títulos de otros tantos personajes representativos del rock irlandés, la selección podría quedar así de sugerente…

Tal vez el más reverenciado por veteranos y novicios de este tinglado sea Van Morrison, todo un carácter. Difícil es quedarse sólo con una del cascarrabias de Belfast, puesto que, además de su talento creativo e interpretativo, ha brillado en muy diversos campos musicales; por eso tantos otros reconocen su pasión por él. Pero sin olvidar de la ‘gloria’ de la ‘chica de ojos marrones’, de lo que ‘Jackie Wilson dice’ y de otras referencias imprescindibles, se puede elegir la gloriosa ‘Moondance’. Tiene un toque de jazz de siempre, melodía y estribillo cautivadores, letra poética, enamoradiza, elegante, interpretación apasionada, arreglos y solos deliciosos, detalles de buen gusto por aquí y por allá… Una excelente obra de arte.

U2 es otra de las referencias con denominación de origen de aquel país. A diferencia del anterior, que ha mantenido siempre un nivel de autoexigencia altísimo, los de Dublin han sufrido bruscos altibajos, de modo que puede decirse que lo mejor de su oferta artística llegó en sus primeros diez o doce años, y desde entonces han llevado una trayectoria… errática (tal vez porque han consumido mucha energía, ilusión, ganas…, en asuntos ajenos a la música). En todo caso también tienen un larguísimo repertorio de éxitos que, uno por uno, serían perfectamente representativos de la contribución de U2 a la causa rockanrolera. Por ejemplo el ‘Sunday bloody Sunday’; el tema es aquel ‘domingo sangriento’ de 1972, que viene a materializar ese concepto que los de Irlanda del Norte llaman ‘los problemas’ refiriéndose al enfrentamiento político-religioso; asimismo contiene todos los recursos y herramientas propias de la banda: inconfundible guitarra, pasión en la voz, estribillo poderoso, melodía resultona…   

Aunque no todos los interesados en esta locura del rock le tengan tanta consideración, Rory Gallagher es, sin duda, uno de sus mejores guitarristas. Muerto prematuramente (47 años), su álbum ‘Irish Tour 74’ era nombrado en aquellos años como uno de los mejores de toda la década, una de las cumbres del rock, y él, un genio precoz nacido para la guitarra; baste recordar que impresionó al mismísimo Hendrix. El álbum entra con un arrollador ‘Cradle rock’, cuyo comienzo, sencillamente antológico, da paso a una demostración empírica de lo que se define como puro rock, una respuesta ideal si alguien pregunta qué es el rock. Sus modos, su gusto por el blues, su virtuosismo han inspirado a miles de guitarristas desde entonces.

Thin Lizzy siempre fue un grupo que caía bien. Su líder, cantante y bajista, Phil Lynot, mulato él, tenia carisma, gracia, y estaba muy dotado para escribir grandes letras y para construir gruesos paisajes. Su voz (que se apagó con 36 años) tiene un cierto matiz suplicante, lo que siempre contrastaba de manera encantadora con la pesada potencia que el grupo lograba generar. Además, ellos fueron de los primeros en combinar lo heavy con lo celta con arrolladores resultados (su visión del ‘Whiskey in the jar’ es una bandera del género); pero mucho más suya es ‘The boys are back in town’,  con ese riff que preside todo el tema, con ese matiz de rock denso, apretado, macizo, tan propio de la banda. El texto lo escribió Lynot al saber que a sus conciertos iban, sobre todo, jóvenes trabajadores que buscaban evadirse, divertirse y, claro, trasegar como buenos irlandeses. Ideal para tocar la ‘air guitar’.     

Desconocidos lejos de su isla, Horslips también supieron ver las posibilidades de combinar tradición céltica con rock, de hecho, hay quien les atribuye el mérito de haber abierto ese camino; además, a menudo han basado sus temas en las leyendas irlandesas, incluyendo la gran epopeya de Eire, el llamado ‘Tain Bo cuailnge’ (Asalto al ganado de Cooley), y el gran héroe Cuchulain. Evidentemente, la fórmula funcionó tan bien que, bien entrado el siglo XXI, eso del rock celta está tan extendido como el teléfono móvil. Su gran éxito fue ‘Trouble (with a capital T)’, o sea, ‘Problema (con P mayúscula)’; es un tema vivaracho, pegadizo, dirigido por unas flautas que se integran con guitarras y baterías como si fueran pandilla de toda la vida; las voces suenan épicas y teñidas de nostalgia.   

NOTA. Salvo los que se han centrado exclusivamente en la música tradicional, ninguno de los mencionados hubiera hecho del rock & roll su vida sin Chuck Berry, que abandonó el escenario definitivamente el 18-III-17. Puede afirmarse que su influencia va mucho más allá de la música y la cultura popular, pues sin duda su aportación determinó la vida de millones de personas. Resulta casi inexplicable que, sesenta años después, sus composiciones no sólo no hayan perdido frescura, sino que mantienen un atractivo irresistible. Las canciones de Chuck Berry no tienen fecha de caducidad, son imperecederas. Hoy mismo, seguro, han nacido muchos bebés que un día tocarán las canciones de este hombre. Ha muerto Charles Edward Berry.
 ¡Viva Chuck Berry!


CARLOS DEL RIEGO

miércoles, 15 de marzo de 2017

LA DISPARATADA CATALUÑA SECESIONISTA Algo que sin duda están consiguiendo los catalanes secesionistas (tanto los políticos como la gente de a pie) es que se hable de ellos. Lo malo es que su presencia continua en los medios se debe más a sus disparates y barrabasadas que a sus méritos

Cualquier disparate es posible
Lo que está sucediendo actualmente en Cataluña es de traca, sobrepasa todos los límites de la razón, puesto que los que claman por la segregación utilizan argumentaciones contrarias a la lógica y, por tanto, objetivamente falsas; mucho más perturbador y preocupante es que hayan contagiado sus desvaríos a tantos y que tantos estén dispuestos a tragarse su esperpéntico argumentario. Asimismo descoloca el hecho de que los medios de comunicación  de allí asuman el pensamiento oficial de modo tan sumiso y acrítico (‘la pela es…’). Por ejemplo, un razonamiento que usan habitualmente quienes todo lo ven a través de las gafas desintegradoras es el de que la democracia está antes y por encima de la ley; sin embargo, la realidad indica, por un lado, que ir a votar no es el único requisito para que pueda hablarse de democracia, sino que su existencia es imposible sin el respeto a las normas (si uno se cree con derecho a quebrar una regla del juego no puede exigir a otros que no quiebren otras); y por otra parte, la ley que regula la votación, o sea, la ley electoral que señala cómo, cuándo, dónde, quién…, tiene que estar escrita antes de la cita con las urnas, o sea, la ley va antes; además, no se pueden someter a referéndum propuestas ilegales. Parecen cosas evidentes, pero existen criaturas que se niegan a quitarse aquellas gafas y, por tanto, a ver la evidencia. Otro dislate usado por líderes y seguidores de la separación es el desprecio y la repulsa que manifiestan hacia la Constitución (materializándolo a veces de un modo tan pueril como la quema pública de ejemplares), sin entender que los cargos públicos están donde están gracias a ella, y que ella es la que les permite a todos la libertad para manifestar lo que quieran. 

Luego está lo del juicio al ex presidente Más y algunos de sus segundos. El caso es que este hombre dice en su defensa que desconocía estar conculcando la ley, que no tenía ni idea de las posibles repercusiones y que, en todo caso, nadie le avisó…. Es curioso cómo personas con eso que llaman exceso de personalidad (como la mayoría de los políticos) se presentan a sí mismos, cuando se ven en apuros, como tontos que no se enteraban de nada, como peleles a los que todo el mundo en su partido y en su gobierno se la estaba pegando sin que nadie les diera aviso. Y para completar el dislate va el tribunal y afirma en su sentencia que no hay malversación de caudales públicos, a pesar de que es incuestionable que el tipo gastó dinero público para fines partidistas; y que tampoco cabe la prevaricación, lo que quiere decir que los jueces asumen como cierto que el pobre chaval obró contra la ley sin saberlo, sin malas intenciones. ¿Es o no es desternillante la postura del imputado? ¿Y la conclusión del tribunal?

Y detrás de todo este tragicómico asunto late lo del ex-honorable que, patriota él, se enriqueció a costa de los catalanes (saqueo de Banca Catalana) y, demostrando un enorme amor por su tierra, evadió todo lo que pudo porque, evidentemente, eso era lo mejor para Cataluña. Sí, amaba tanto a su terruño que pensó que lo mejor era privarle de todos los fondos posibles, y también era conveniente para la patria chica proteger a sus vástagos para que no tuvieran problema a la hora de imitar sus prácticas y multiplicarlas. Aquí también resulta dudosa la acción de quienes no han hecho nada para impedir que sus retoños sigan llevando a cabo ‘sospechosas’ y abundantes operaciones monetarias como si no hubiera pasado nada. ¿No hay algo grotesco en toda esta historia?   

En fin, el caso es que por más evidencias que se pongan encima de la mesa, los fanáticos de la idea separatista que siguen tras tan cuestionables líderes van a tirar para adelante sin querer ver la realidad. Así, parte de la población catalana no tiene para nada en cuenta el hecho de que, desde fuera y desde dentro, se les esté demostrando que los que dirigen el cotarro saben que jamás alcanzarán lo que prometen, puesto que el objetivo que les han garantizado es tan imposible como la vida en el sol; es decir, siguen huyendo hacia delante a sabiendas de que jamás alcanzarán la zanahoria. Además, los que acuden masivamente a las manifestaciones con banderas desmembradoras parecen olvidarse de que los máximos adalides de la idea tienen los armarios llenos de cadáveres (económicos, fiscales, políticos…) y parecen sentirse muy a gusto en medio del escenario.   

Aunque reiterativo, es necesario recordar la falsedad más grande, que es la creencia de que Cataluña es sólo de los catalanes, cuando la realidad es que todos los españoles son dueños de toda España.

Donde sí encajaría Más a la perfección sería en Los Simpsons.


CARLOS DEL RIEGO

domingo, 12 de marzo de 2017

CHICAS EN LAS CANCIONES DE LOS BEATLES Y DE… El cuarteto de Liverpool tuvo tiempo en menos de 10 años de escribir alrededor de 200 canciones, no pocas de las cuales hablan de mujeres, ya sea de modo ficticio o de chicas concretas… También lo hicieron sus ‘rivales’ Rolling Stones.

Estaban rodeados de chicas desde el primer momento, ¡cómo no iban a hablar de ellas en sus canciones!.

Está la mujer situada estos días (cercanos a su Día Internacional) en el primer plano del escenario de la actualidad, un lugar que, en el teatro del rock & roll, no abandona jamás, puesto que ella es la protagonista de un sinfín de canciones; en todos los estilos y géneros, con todos los ritmos, en las más variopintas temáticas, la fémina ocupa el espacio central. De hecho, sería extremadamente difícil encontrar alguna banda de rock que no tenga un buen número de composiciones que hablen de chicas. Por otro lado, en junio se conmemora el medio siglo del prodigioso álbum ‘Sergeant Pepper’ de The Beatles, el cual contiene piezas dedicadas a ciertas mujeres; y ya puestos, se pueden repasar otros títulos sobre el tema del cuarteto…, y metidos en faena, ¿por qué no echar un vistazo a las de los Rolling Stones, sus principales ‘rivales’?

Todo lo que sigue es más que conocido por los incondicionales del histórico cuarteto pero, seguro, les resulta reconfortante recordar… Del cincuentón ‘Sergeant Pepper’ sale, majestuosa, ‘Lucy in the sky with diamonds’; es innegable el ambiente sicodélico y las frases más o menos alucinadas, sin embargo, la cosa no va de drogas (a pesar de lo de LSD), sino que, según el propio Lennon, el título procede de una idea que tuvo después de ver un dibujo del cole de su hijo Julian en el que se veía a su compañera de clase Lucy, que estaba en el... En este icónico y renovador álbum también se encuentra la encantadora ‘Lovely Rita’, un tema muy rítmico, dinámico, único. Se cuenta que al llegar Paul a un aparcamiento una controladora de tráfico le estaba poniendo una multa, habló con ella y de allí salió la inspiración…, pero eso nunca sucedió, según dijo él; parece que el texto es un divertimento en torno al término estadounidense ‘meter-maid’ (que aparece en el primer verso), puesto que alguien le comentó que en USA había chicas policía que vigilaban el pago del aparcamiento, la cosa le hizo gracia y... En todo caso resulta asombroso lo poco que estos tipos necesitaban para poner en marcha la maquinaria creativa y construir obras de arte calificables como excelentes; estas dos piezas son la demostración empírica.    

‘Eleanor Rigby no habla de una chica, sino de una anciana solitaria que “recoge el arroz de una iglesia donde se ha celebrado una boda” y de un cura sin fieles; Eleanor muere y el cura se encarga del funeral… El nombre lo pergeñó Paul uniendo el de una actriz de la película ‘Help’, Eleanor Bron, y el de una tienda…, aunque se sabe de una tal Eleanor Rigby enterrada en un cementerio en cuya iglesia se había conocido Paul y John. Sea como sea, se trata de una canción superlativa acerca de la soledad y construida exclusivamente con voces e instrumentos de cuerda: chelos, violas y violines, es decir, sin guitarras, baterías, teclados..., sin que ellos tocaran ningún instrumento. Una melodía irresistible, maravillosa, que atrapa irremisiblemente.

En otro de sus elepés imprescindibles (¿cuál no lo es?), el conocido como ‘Doble álbum blanco’, hay varios títulos referidos a las damas. ‘Dear Prudence’ trata de la hermana de la actriz Mia Farrow, la cual, durante un retiro espiritual en la India a las órdenes de un famoso santón, se tomó demasiado en serio lo de la meditación transcendental; con este tema John, que estaba allí, le pedía que aterrizara y se uniera a la panda; esta canción cercana y emotiva era una de sus favoritas y, curioso, el batería fue Paul. Del mismo Lp es ‘Martha, my dear’ que, a pesar de parecer un tema de amor, alude al querido perro pastor de Paul; contaba éste que llamó así a la perrita porque así nombraba a su musa; pero hay más, pues alguna vez insinuó que puede haber referencias a una antigua novia; impresionante es el arreglo de cuerda y metal, el resto lo toca todo Macca, sin dejar meter baza a los otros tres. Y otra más del ‘blanco’; como todo ‘betlemaníaco’ sabe, John escribió la deliciosa ‘Julia’ pesando en su madre, muerta tras ser atropellada por un coche cuando él era adolescente; por otra parte, en una de las primeras frases de esta emotiva pieza habla de un ‘niño del océano’, que es precisamente lo significa ‘Yoko’ en japonés; así, John habla en el mismo tema de las dos mujeres de su vida.

Otra dedicada a alguien concreto es ‘Politene Pam’ (del ‘Abbey road’). John explicó una vez que va de a una fan de cuando tocaban en The Cavern, una ‘grupie’ llamada Pat que comía polietileno, o sea, plástico (¿); en otra ocasión dijo que pensaba en una chica vestida sólo con plástico y de modo sexy; y en otro momento señaló que, simplemente, buscaba algo sobre lo que escribir…

Es evidente que, en The Beatles, el tema de cada canción y la forma de materializarla no se ciñe a un guión predeterminado, homogéneo y dedicado exclusivamente a la idea central, sino que ellos dejan que la canción fluya, crezca y llegue a donde quiera, es decir, sin constreñirla a una trama y desarrollo preconcebidos. Sí, ellas están muy presenten en las canciones de los cuatro fabulosos (también están Molly, Vera, Michelle, Loretta, Sadie, Mary Jane…), sin embargo, lo importante no es a quién canten, sino la calidad artística de la pieza, y las de estos tipos siempre ofrecen belleza, atractivo, estilo. Genio.

Y de The Rolling Stones? Sus textos son mucho más directos, más toscos y con menos matices; de hecho, cuando en sus temas aparecen mujeres determinadas casi siempre son novias o ex novias. Algunos ejemplos: títulos tan significados como ‘Wild horses’ o ‘Simpathy for the Devil’ están inspirados en la alocada Marianne Faithful, que engañó a Jagger con Richards. La emblemática ‘Brown sugar’ no trata de drogas, sino de la cantante y actriz Marsha Hunt, quien fue pareja de Mick y con quien tuvo su primer hijo. ‘Stupid Girl’ y ‘Yesterday´s papers’ apuntan a otra antigua novia de Jagger, Chrissie Shrimpton. La trepidante ‘Happy’, una de las escasas con Richards a la voz solista, la hizo éste para Anita Pallenberg, ex suya y de Brian Jones. La preciosa ‘Ruby Tuesday’ habla de otra ex de ambos, Linda Keith. ‘Miss you’ la pensó Mick para Jerry Hall. ¿Y ‘Angie’?, pues no es Angela Bowie ni Angie Dickinson, ni siquiera la hija de Richards (autor de casi todo el tema) llamada Angela.

Sí, ¡qué sería de estos grupos y del rock en general sin la inspiración femenina!


CARLOS DEL RIEGO

miércoles, 8 de marzo de 2017

PABLITO PODEMOS Y SUS EMBUSTES. Aunque haya quien lo niegue o lo justifique, la tozuda realidad señala al káiser Pablo Podemos como un trolero, un manipulador y un caradura capaz de mantener la mentira ante la demostración empírica que la desmiente.

No es necesario comentar.
Los métodos, las palabras y los actos de Pablo Podemos encajan perfectamente con el pensamiento del populista fascistoide y totalitario. La última de tal sujeto y la organización que lidera es lo del acoso a los periodistas que osan criticarlos. Hay pruebas (mensajes y llamadas siempre desde el anonimato, claro), pero él y sus adláteres lo niegan, y cuando las pruebas se impongan ya tienen preparada la respuesta, que consistirá en dar la vuelta a las cosas, de modo que explicarán que su propósito siempre ha sido denunciar el desamparo de los periodistas y su precariedad laboral; además, dada su querencia al acoso callejero (eso que llaman escrache), al boicoteo de actos de los demás y al apoyo a ‘sus’ violentos, lo del hostigamiento vía redes sociales no es más que lo mismo pero desde casa. Son tácticas de manipulación, persecución y amenaza más que conocidas y utilizadas por todos los dictadores de uno y otro signo, tácticas que ya usaba el poderoso Ministro de Propaganda nazi, Joseph Goebbels, quien era capaz de convertir una cosa en su contraria y defenderla con gran vehemencia, como si de verdad él estuviera convencido de su mentira. Tal que así se maneja Pablito, el hijo del terrorista del Frap (no extrañará su cercanía al entorno etarra).    

Otro ejemplo del sesgo de tiranuelo que exhibe sin ningún rubor el mencionado individuo es el hecho de calificar a quienes no están con él, a quienes discrepan de su opinión (incluso dentro de la estructura que preside), como ‘enemigos’; de este modo, sus ‘hitlerjugend’, sus Juventudes Hitlerianas, tiran de acoso, de desprecio, de insulto, de sentimiento de superioridad como parte del arsenal con que pretenden la aniquilación del enemigo. Este Pablo ‘Podemos’ Iglesias (su segundo apellido es Turrión, término del leonés antiguo que tiene su origen en los animales que continuamente están embistiendo a otros animales y a personas, y que significa cabezón, tozudo) es un hacha cuando se trata de humillar a sus ‘enemigos’ ideológicos pero, a la vez, se rebela cuando se le paga con la misma moneda. Idéntico al pensamiento y proceder de Trump.

Igualmente utiliza la mentira con gran naturalidad, sin descomponerse, demostrando que el suyo es un rostro de mármol; y ello es así porque se piensa agraciado con la única verdad y, por tanto, se siente legitimado para usar la trola y la engañifa con el fin de lograr sus objetivos. En general, quienes se sitúan en la izquierda más pura o en la derecha extrema están convencidos de que el fin, su fin, justifica sus medios…, privilegio que, claro, no tienen otros fines. Así, con un rostro verdaderamente pétreo, el muy turrión proclamó que uno de los suyos, apellidado Bódalo, estaba en la cárcel por ser sindicalista (si así fuera no sería el único sindicalista encerrado), cuando en realidad está condenado en firme por atizar a un concejal del Psoe y por amenazar, insultar y zarandear a una mujer embarazada que ejercía su derecho al trabajo en día de huelga (por cierto, esta mujer declaraba que jamás olvidaría la expresión de odio y de rabia de semejante estantigua). Una de dos, o Pablo sabe que está mintiendo, en cuyo caso el calificativo que se merece es obvio, o está tan fanáticamente convencido de su verdad que su nublado cerebro es capaz de arrinconar la razón e imponer como cierto lo que le conviene. Y llegado el momento, ante pruebas y testimonios concluyentes, el sectario recurrirá a lo de ‘esto es un montaje, una persecución’. Es también digno de estudio cómo él, que menosprecia a quien le parece (Iglesia, banca, empresa, ejército…), grita indignado cuando hay quien denuncia sus excesos y los de sus cofrades, sus insultos y disparates, y denuncia que existe una campaña contra ellos y que los grandes poderes no los dejan en paz…, es como el terrorista asesino que exige sus derechos cuando lo pillan con la pistola humeante ante el cadáver de su víctima. 

El embuste es, en fin, una de las principales herramientas de caudillo turrión y, por extensión, de todos los que integran su corte. Lo curioso es que la trola muchas veces desemboca en esperpento, en negación de lo evidente; por ejemplo, el tiparraco y sus acólitos son capaces de declarar, entre otros desvaríos, que el chavismo ha acabado con la pobreza en Venezuela (¿). Otra muy gorda la soltó hace unos días (III-17), cuando largó que él nunca había exigido el control del centro de espionaje (el CNI) en aquel intento de unión con el Psoe de Sánchez para alcanzar el poder; sin embargo, el digital eldiario.es (algo así como el boletín oficial del partido) publicó en febrero de 2016 que Iglesias pedía al Psoe, a cambio de su apoyo y en caso de alcanzar la mayoría suficiente, la Vicepresidencia y, entre otras cosas, la supervisión del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), el control del BOE y el del Centro Nacional de Inteligencia (CNI). Asombrosamente, y dejando en evidencia una jeta más dura que una de AC DC, el trolero personajillo vocea por ahí que él nunca pidió nada de eso. ¡Hay que tener un don natural y mucho entrenamiento para mentir con tanto aplomo!
No es que la mayoría de los que se dedican a esta desprestigiada y vilipendiada profesión no utilicen las mismas herramientas para retorcer la realidad a su conveniencia (todos presionan a la prensa, aunque no todos acosan), pero es que lo de esta criatura bordea lo patológico. Tal es el engreimiento y descaro con que se maneja esta gente.   


CARLOS DEL RIEGO

domingo, 5 de marzo de 2017

IMPRESCINDIBLES SEGUNDAS FIGURAS DEL R&R Y ROCKABILLY . Además de los nombres de leyenda, el rock & roll a la clásica y el rockabilly cuentan con un magnífico segundo plano en el que se sitúan entrañables e imprescindibles personajes que, con algo menos de brillo, reparten tanto y tan buen r & r.

Johnny Kidd and The Pirates, esencias de rock & roll desde un segundo plano.

Cuando se habla de rock & roll clásico o de rockabilly se piensa en las figuras más añejas: Elvis, el viejo Chuck, Jerry Lee, Little Richard, Burnette, Hank, Buddy y sus sempiternos compañeros de viaje, Fats, Bill, Roy, Gene, Eddy, Bo, Perkins, Cats…, pero no sólo fueron ellos los que construyeron este monumento, sino que hay muchos otros que, con menor renombre, han contribuido lo suyo para que no faltara nada a la obra, encargándose de escenarios menos vistosos pero igual de necesarios. Así, a pesar de sus largas trayectorias, siempre ha sido difícil ver un concierto de aquellos; mucho más fácil ha sido disfrutar un directo de algunos de los segundos espadas del rockabilly, algunos de los cuales mantuvieron la llama encendida cuando el calor de las modas se iba hacia otras direcciones.

Además, aunque muy esporádicamente, tipos como Sleepy, Cavan, ‘Fingers’ o Matchbox también disfrutaron de sus momentos de gloria. En común tienen, además de su pasión incondicional, una irresistible querencia por el directo, lo que los lleva a estar casi permanentemente de gira; de hecho, varios siguen en activo.

¡Cómo no recodar a Sleepy La Beef! Ese grandísimo grandullón de voz profunda y clara llegó a compartir escenario con Elvis, e incluso contó en cierta ocasión que éste le pidió prestada la guitarra (aunque el rey no tocaba) y se la devolvió hecha unos zorros… Su primer single es de 1957; ahora, octogenario y más delgado, todavía se planta ante el micro guitarra en mano para dejar caer un arrollador ‘Hello Josephine’, por ejemplo. Como dato curioso se puede señalar que ha publicado discos en seis décadas diferentes.

Procedente de los primeros tiempos, hay que hablar de Johnny Kidd (y Los Piratas), que fue de los primeros británicos en entender de qué iba este invento, con lo que se convirtió en auténtico predicador del rock & roll en la Inglaterra de los últimos cincuenta del pasado siglo; lo suyo es esencia de rock & roll con clase y personalidad, a lo que contribuía su parche en el ojo (él contaba que una vez que afinaba el bajo se rompió una cuerda y le destrozó el ojo…) y su aparatosa puesta en escena (sable de pirata, velas como fondo). Excelente compositor, dejó para la historia un clásico omnipresente en cualquier antología del género, el mil veces revisitado ‘Shakin´ all over’. Desgraciadamente se lo llevó la carretera en 1966. Sólo tenía 30 años. Escuchándolo hoy dan ganas de enrolarse en su tripulación.

Como él, Freddie ‘Fingers’ Lee también era inglés y lucía parche (éste perdió el ojo de niño). Fue un pianista incendiario y con directos impactantes: podía quemar, aporrear, romper el piano. Brillaba Freddy cuando deslizaba sus dedos por las teclas y cantaba cosas como, por ejemplo, ‘One eye boogie boy’ (‘El boogie del chico tuerto’); era un incondicional de Jerry Lee y se codeó con los Beatles en el mítico Star Club de Hamburgo. La enfermedad se lo llevó en 2014. 

Shakin’ Stevens es otro incansable rockero británico (de Gales) que alcanzó sus grandes éxitos cuando peor estaban las cosas para el rock & roll al viejo estilo, es decir, en los años ochenta; entonces, de manera sorprendente, alcanzó varios números uno tirando de clásicos (‘Green door’) o de piezas de cosecha propia (‘Oh Julie’). El también galés Crazy Cavan (con sus Rythm Rockers) se ha recorrido Europa de escenario en escenario distribuyendo rock & roll vivaracho y entusiasmado; y sigue en las mismas, sin pensar en los años y en la pérdida del tupé…

Tanto mérito tiene el estadounidense Robert Gordon, cuya voz busca una inflexión y sonoridad semejable a la de Elvis; inconfundible resulta ese brioso y evocador ‘Rockabilly boogie’. No se puede olvidar a los neoyorquinos Sha Na Na, divertidos, alocados, guardianes de las poses y gestos, coreografías, voces y ritmos de los años infantiles del rock & roll; desde 1969 lleva la multitudinaria formación regalando directos plenos de vitalidad y buen rollo.

También hay que incluir en este segundo plano del rockabilly a los Matchbox, quienes se vieron obligados a convivir con el punk y ‘new wave’ en aquellos excitantes últimos años setenta del XX, cuando eso del rock & roll a la clásica se veía casi como una excentricidad; desde 1971, con el lógico baile de integrantes, la banda no ha dejado de llevar su irresistible ‘Rockabilly rebel’ por toda Europa. ¿Y los escoceses Shakin’ Pyramids?; los más incondicionales recordarán su extraña formación de dos guitarras y batería y su trepidante rockabilly acústico… En fin, podría ampliarse la lista mucho más.

Igualmente es necesario un recuerdo para todos esos grupos españoles que, con corazón de rock & roll, mantienen el buen nombre del género por puro amor al arte, sin pretensiones de grandeza. Basten mencionar tres bandas que, con todo el mérito del mundo, ofrecen y transmiten rock & roll y rockabilly con toda la pasión del mundo: Los Bilbobillies, Los Rock & Bordes, o los inagotables Olaf y Los Bidones. Por ejemplo.

Puede que ninguno de los aquí señalados aparezcan en las páginas de honor de las enciclopedias, pero sin la menor duda merecen todo el reconocimiento y admiración.


CARLOS DEL RIEGO

jueves, 2 de marzo de 2017

ESCANDALOSOS EJEMPLOS DE INGRATITUD DE LA HISTORIA MODERNA. Pequeñas ingratitudes sufre y comete todo individuo, pero existen grandes actos de ingratitud perpetrados por instituciones legítimas y con prestigio contra personajes que lucharon y consiguieron grandes beneficios para el género humano.

Algunos de los atletas negros de USA que fueron despreciados por el presidente y parte del pueblo estadounidense tras los Juegos de Berlín 1936.
Irena Sendler con uno de los miles de niños que arrancó de las garras de los nazis. Al jurado del Nobel de la Paz le pareció poca cosa..
Folke Bernadotte ante uno de los autobuses con los que salvó a miles de personas, entre ellos muchos judíos. Luego fue asesinado por otros judíos..

Según el dicho, ‘De biennacido es ser agradecido’, cuyo significado permite que el refrán pueda formularse al revés, o sea, ‘De malnacido…’. La ingratitud es una de las constantes en el hombre desde que éste pisa la Tierra. Hay ejemplos cotidianos y de  alcance y consecuencias más limitados; pero también puede enumerarse una larga lista de ingratitudes que se han convertido en auténticas injusticias. Ciñéndose la cosa al siglo XX existen algunos casos verdaderamente sangrantes, tanto por el acto en sí como por el hecho de que el desagradecimiento haya llegado desde organismos legítimos, gobiernos o colectivos.    
  
En mayo de 1948 Palestina era un volcán: la guerra entre árabes e israelíes era inminente. La ONU nombró al sueco Folke Bernadotte como mediador para tratar de evitar lo inevitable. Hombre de una honestidad a toda prueba, redactó dos propuestas de paz y varios informes describiendo la situación, todos ellos de una ecuanimidad difícil de encontrar en ambientes políticos y diplomáticos. Pero los grupos terroristas judíos (con apoyo, seguro, de ciertos políticos) no estaban dispuestos a negociar nada, de modo que en septiembre de ese año miembros de la organización Stern (o Lehi, o Irgún, que en 1946 voló el hotel Rey David con resultado de 91 muertos) detuvieron el convoy de Berdadotte, que atravesaba el sector judío de Jerusalén; preguntaron por él y, localizado, ametrallaron su coche acribillando al diplomático sueco y a otro enviado de la ONU, el francés André Serot. La Organización de las Naciones Unidas condenó el acto, pero sin levantar la voz, casi de tapadillo. Lo que sorprende es que el conde Berdadotte había arriesgado su vida varias veces durante la Segunda Guerra Mundial; primero intercambiando prisioneros de guerra con Alemania (se calcula que libró de los campos de concentración a más de 10.000 personas), y luego, al final del conflicto, cuando los nazis aceleraban ‘la solución final’, rescatando a no menos de 15.000 personas en autobuses de la Cruz Roja Sueca, entre ellos cientos, tal vez miles, de judíos destinados a las cámaras de gas. Entre quienes conocían y apoyaron el atentado contra el diplomático sueco estaban personalidades tan relevantes como Isaac Shamir. Asimismo, tras ser procesados los asesinos, Ben Gurión los indultó de inmediato y se ocupó de que entraran en el ejército sin más. Se trata de un caso evidente de ingratitud que, al menos, fue reconocido cuando Israel admitió la responsabilidad judía en los hechos y el valor del conde Bernadotte.

Estados Unidos incluyó en su selección para los Juegos Olímpicos de Berlín 1936 a 18 atletas negros (incluyendo dos chicas). Todos ellos habían sufrido, en mayor o menor medida, discriminación racial en su país. Una vez en Alemania todos los atletas, también los negros, fueron tratados con suma cortesía, incluso la gente les pedía autógrafos y les daba la mano sin tener en cuenta las leyes racistas de Nurenberg, dictadas meses atrás; la propaganda nazi había aconsejado ser cordiales con los integrantes de los equipos de todo el mundo, sin tener en cuenta razas, a pesar de lo cual, las imágenes dejan patente que el pueblo alemán estaba sinceramente encantado con los visitantes. Algunos de aquellos atletas pasaron a la posteridad y a la gloria olímpica, como Jesse Owens, como el también esprínter Ralf Metcalfe o el saltador de altura Cornelius Jhonson; sin embargo, las dos primeras mujeres afroamericanas que USA llevó a unos juegos, Louise Stokes y Tidye Pickett, fueron reemplazadas por atletas blancas en la final del 4x100 cuando ya estaban en la pista. Al regresar a su país, aquellos verdaderos héroes del estadio volvieron a sufrir racismo, y como muestra baste señalar el ‘detalle’ del presidente Roosevelt, que sólo recibió en audiencia a los atletas blancos, negándose tal honor a los negros (que ganaron 14 de las 56 medallas que se llevó el equipo USA). En este sentido, Jesse Owens, cuádruple oro en aquella cita olímpica, repitió hasta la saciedad que no fue Hitler quien lo despreció (a pesar de lo que escribieron algunos periodistas estadounidenses a los que la verdad no les impidió escribir una buena historia), sino el Presidente de Estados Unidos, que no le envió ni un telegrama de felicitación. Tanto la Casa Blanca como gran parte de la población fueron desleales, desagradecidos, ruines…, y ello a causa de uno de los más bajos, necios e inhumanos sentimientos que pueden albergarse, el racismo, tan cercano al nazismo al que poco después combatirían.

Poco conocida es la historia de la polaca Irena Sendler. Cuando los ejércitos nazis entraron en Polonia (1939), Irena ya trabajaba en una institución benéfica, velando por todos los necesitados sin atender a creencias o etnias (ella era católica). Después, al ser hacinados los judíos en el gueto de Varsovia, se las arregló para sacar de aquel infierno nada menos que a 2.500 niños, utilizando mil y una estratagemas para burlar a los soldados alemanes; además, tomó nota de nombres y direcciones con el fin de intentar reintegrarlos a sus familias al terminar la guerra, aunque la mayoría de los padres no sobrevivieron (la historia de ‘la niña de la cuchara de plata’ es irresistiblemente emocionante). Lógicamente ella corría un elevadísimo riesgo, pues si la descubrían…, y la descubrieron en 1943, la torturaron para que denunciara a colaboradores y judíos, pero Irena soportó lo insoportable y no pronunció un solo nombre. Se libró del paredón porque un soldado se dejó sobornar… Su historia volvió a la actualidad cuando en 2007 el gobierno de Polonia la propuso para el Premio Nobel de la Paz; pero el dudoso comité noruego (que ha cometido recientemente abundantes y estrepitosas necedades) optó por el oportunismo y se lo entregó al no menos mamotreto de Al Gore por un sesgado documental que está olvidado, superado y mil veces ridiculizado. Irena Sendler murió el año siguiente, con 98 años, tras recibir reconocimientos y agradecimientos procedentes de todo el mundo…, excepto de esa cofradía de ilustres tontos rendidos a la corrección política que conforman el comité del Nobel de la Paz, los cuales dan más mérito a quien rodó un documental (a saber cuánto hizo Gore) sin mayores consecuencias que a quien consiguió cambiar el negro destino de tantas personas.   

Es justo recordar de vez en cuando los nombres de estos auténticos héroes que fueron pagados con ingratitud, a veces hasta con desdén.


CARLOS DEL RIEGO