domingo, 31 de julio de 2022

EL VERSO MÁS REPETIDO DE LA HISTORIA DE LA MÚSICA POPULAR: ‘NO PUEDO VIVIR SIN TI’

 


Beatles fueron los primeros en dejar de usar tópicos románticos en sus letras. En la imagen, manuscrito de Lennon del tema 'A day in the life', vendido por más de un millón

Aunque resulte difícil de creer, aun se escriben canciones con el verso ‘no puedo vivir sin ti’ y otros que vienen a decir lo mismo. Debe ser la frase más repetida en la historia de la música pop, puesto que desde se empezaron a vender discos hasta la época actual hay autores que la siguen incluyendo en sus composiciones, y cantantes que la siguen cantando…, sin que les entre el mínimo sonrojo, casi como si estuvieran cantando algo diferente

‘No puedo vivir sin ti’, ‘Si tú no estás no quiero vivir’, ‘Sin ti me siento morir’, ‘Sin ti mi vida no tiene sentido’, ‘Sin ti no sé vivir’, ‘No quiero estar sin ti’, ‘Te necesito para vivir’ y otras de muy parecida especie aparecen en canciones pop y rock desde que estos géneros existen. Deben ser miles, tal vez decenas de miles las melodías que utilizan el muy manoseado ‘no puedo vivir sin ti’. A pesar de ello y por increíble que pueda parecer, hay hoy (julio 2022), autores y compositores que no dudan en incluir expresiones como aquellas; y si siguen repitiendo ese verso una y otra y otra vez es porque hay público que lo sigue consumiendo, ya sea envuelto en pop, en canción ligera, rock, funk, reguetón y, en general, en cualquier estilo musical.

En los comienzos de esto del rock y el pop los autores apenas se salían de las letras que sabían que iban a funcionar, es decir, las que hablaban de chico-chica, amor y desamor, pasión o como quiera llamarse a las relaciones sentimentales. Los Beatles (que puede decirse que son la principal referencia) comenzaron escribiendo canciones de este tipo, algo lógico teniendo en cuenta que eran los primeros sesenta y ellos eran cuatro chavales de apenas veinte años. Sin embargo, como en muchos otros aspectos (musicales o no), los cuatro de Liverpool no dejaron de innovar, de avanzar, de evolucionar, de manera que muy pronto decidieron quitar protagonismo a las canciones de chico-chica; no es que dejaran de hacerlas, sino que ampliaron notablemente los temas sobre los que componer y cantar. Baste recordar que en el fabuloso ‘Revolver’ (1966), Jhon y Paul accedieron a que fuera una canción de George la que abriera el álbum porque ya no iba de amores juveniles, de hecho hablaba de algo tan poco romántico como los impuestos (‘Taxman’); a partir de ese momento (ya había habido algún precedente) la temática de los temas que firmaban los compositores de los Beatles se abrió hasta el infinito. Así, antes de la separación escribieron sobre la amistad, sobre cielos sicodélicos con diamantes, sobre viajes mágicos y misteriosos o campos de fresas, sobre el paso del tiempo y la llegada de la vejez, sobre ese ‘doctor’ que hacía magia y sobre ‘maría’ (más o menos veladamente), y hablaron de dinero, de la felicidad como arma, de sucesos varios, sobre el sexo, la revolución o la dureza del camino, contra el racismo o, en fin, acerca de asuntos de menor trascendencia como las morsas, martillos, submarinos o jardines de pulpos. Y al lado de esos asuntos, también metían deliciosas canciones de amor, aunque ya sin rastro de aquellos versos tan tópicos y manidos.

Durante los años sesenta muchos grupos contemporáneos de los Beatles seguían escribiendo mayoritariamente acerca de amores juveniles con mucho ‘no puedo vivir sin ti’, y aunque hubo excepciones (Dylan, Fogerthy, Gaye), las listas de éxitos estaban copadas por letras de ese jaez. Y siguió ocurriendo así en gran parte de los años setenta, puesto que muchas bandas de rock grueso, heavys y progresivos, centraban sus letras en temas sentimentaloides, a veces de la manera más cursi y empalagosa. Entonces llegó el punk, que rompió con el negocio del ‘sin ti no sé vivir’…, pero sólo momentáneamente.

En las décadas siguientes la temática del rock se ha diversificado, pero no así la del pop y géneros más blandos, donde el ‘no puedo vivir sin ti’ se multiplica y se reproduce sin que quienes ejercen el oficio de escribir sean conscientes de que están repitiendo un tópico, un estereotipo sobado, trillado y vulgar. 

Sesenta años después de que los Beatles ‘inventaran’ el concepto de pop y rock, resulta incomprensible, desconcertante, que haya autores que sigan recurriendo a tan manoseado verso y continúen dedicando sus canciones a las relaciones romántico-sentimentales; sobre todo teniendo en cuenta la cantidad de materias y cuestiones que hoy se plantean para escribir una canción. Pero si sigue funcionando…  

CARLOS DEL RIEGO

miércoles, 27 de julio de 2022

EL POLÍTICO MÁS CORRUPTO DE LA HISTORIA, EL CARDENAL FRANCÉS MAZARINO


Julio Mazarino, modelo de corrupto, modelo de político

Una nueva sentencia de los tribunales españoles condena a políticos por corrupción. En realidad no es una sorpresa. Y es que política es sinónimo de corrupción, como se viene demostrando desde hace milenios en todas partes. El cardenal francés Mazarino podría dar lecciones de corrupción

La política es el poder, pero también es corrupción, la cual no consiste sólo en meter mano en la caja. También se es corrupto cuando se coloca a amiguetes, familiares, compañeros de partido…, cuando se distribuyen a voluntad y sin supervisión subvenciones, ayudas, financiaciones…, cuando se aceptan sobresueldos, dietas, viajes, pluses para vivienda o transportes, fondos adicionales, regalos…, cuando se aprueban concesiones o fondos para tal partido, sindicato o gran colectivo a cambio de apoyos y favores políticos…, cuando se utilizan los medios y recursos del estado (dinero público) en beneficio propio o del partido… Sí, las modalidades de la corrupción son infinitas (incluyendo hacer la vista gorda), sobre todo cuando se tiene poder suficiente. Así se demuestra mirando la Historia, en la que aparecen infinidad de políticos (o quienes poseen el poder) absolutamente manchados por la corrupción. Es inevitable: el político es corrupto en función de la cantidad de poder que acumule y del tiempo que lo acumule.

Hace unos 5.200 años unos sumerios ‘inventaron’ la escritura, puesto que sólo apuntando se podía saber quién había pagado los tributos y cuánto; seguramente los funcionarios del palacio y los sacerdotes del templo se quedarían con su parte, e igualmente otros ‘políticos’ que tuvieran acceso a los tributos. Unos milenios después, en el año 60 antes de Cristo, Craso formó con César y Pompeyo el Primer Triunvirato; inmensamente rico, Craso había hecho gran parte de su fortuna con la especulación fraudulenta de terrenos, y cuando tomó su parte de poder su patrimonio se disparó. En España, el Duque de Lerma, valido de Felipe III desde 1598, acumuló todo tipo de títulos nobiliarios, distinciones, cargos y sueldos, nombró y destituyó a conveniencia y, en fin, acumuló tanto que al saber que el rey lo iba a destituir se hizo nombrar cardenal para así no ser juzgado. 

Son sólo tres ejemplos de la infinita lista de políticos corruptos de la Historia (que equivale a la de políticos), pero ninguno se acerca al nivel de perversión, ambición, avaricia, astucia y egoísmo del cardenal Mazarino. Nacido en Italia, primero fue consejero y mano derecha del Papa, y luego se naturalizó francés; en 1642 accedió al cargo de Ministro de Estado (sucediendo al cardenal Richelieu) del rey Luis XIII de Francia, aunque según casi todos los historiadores Julio Mazarino era quien mandaba y ordenaba en el país vecino, y así siguieron las cosas incluso cuando asumió el trono Luis XIV. Durante los 18 años que actuó como dueño de Francia, Mazarino trincó por todas partes hasta acumular una fortuna fabulosa, incalculable.

 Como ministro, Mazarino recibía 20.000 libras al año, como Jefe del Consejo Real 6.000, como cardenal francés 18.000, superintendente de la educación del rey, 60.000, y otras 100.000 libras anuales como indemnización personal. Además, era Obispo de Metz, prior de Chastenay, abad de tres o cuatro abadías y otros treinta cargos de menor alcance; en total, por estos conceptos se embolsaba unas 500.000 libras al año. Era el gobernador de seis regiones francesas, entre ellas Alsacia, Auvernia o Provenza, y era el capitán de Fontainebleau y Vincennes. También poseía varios ducados, como el de Nivernois, Doyziois o Mantoue, y era el barón de Mayenne, todo lo cual le proporcionaba inmensas cantidades.

 

Pero el cardenal Mazarino sólo quería una cosa: más. Se hizo nombrar jefe del aprovechamiento de aguas y bosques de varias regiones, quedándose con todo lo que abonaban los campesinos y pobladores de Ham, Marie, La Fere o Saint Gobain. Sus fincas, terrenos y bosques eran minuciosamente explotados (madera, ganado, caza, pesca) sin descuidar la gestión ni perdonar un céntimo. 

 No desatendió su vena empresarial, ya que era posesor de un sinfín de empresas, sociedades mercantiles y comerciales, negocios y compañías de muy diversos ramos. El avariento cardenal era armador y propietario de una auténtica flota de barcos mercantes, entre ellos el ‘Cardenal’, el ‘San Juan Bautista’, el ‘Saint Etienne’, ‘Le Bergere’, el ‘Anna’ y varios más. Comerciaba con metales, marfil, cereales…, explotaba todo tipo de materias, desde corcho a coral, y para no tener problemas se compró un puerto en Argelia. Fue accionista mayoritario de la Compañía del Norte, dedicada a la pesca de la ballena y la comercialización de su aceite.

 No contento con todo ello, el clérigo se adjudicó los suministros al ejército, al que vendía trigo, centeno, municiones… Y además, obligó a todos los corsarios franceses a entregarle un tercio de los beneficios que conseguían con sus abordajes y rapiñas.         

 Y por si faltaba algo, este auténtico número uno de la corrupción, decretó que, como Ministro Principal de Estado, todos sus negocios, comercios, ventas, empresas, barcos, fletes, importaciones, exportaciones y posesiones quedaran totalmente exentos de impuestos, aduanas, tasas, peajes o aranceles… Calculador, meticuloso, astuto y sin escrúpulos. Un buen político.

 Difícilmente podrá encontrarse otro político que haya llegado tan alto en la escala de la corrupción. Aun hoy resulta imposible calcular cuánto se embolsaba anualmente el purpurado y a cuánto ascendía su fortuna, aunque habría que hablar de miles, de cientos de miles de millones de libras… Seguramente muchos de los que hoy ostentan cargo político desearían vivir en aquella época, cuando el que mandaba no tenía que rendir cuentas.

 CARLOS DEL RIEGO

domingo, 24 de julio de 2022

¿QUIENES ERAN BILLIE JEAN, SHARONA O LAYLA?

 


Más de cuarenta años separan a Sharona Alperin de 'My Sharona'

¡Cuántas veces se canta apasionadamente una canción sin saber realmente de qué va o de quién habla! Y es que en algunas ocasiones las letras se refieren a personas concretas, como sucede con algunas de las piezas más recordadas, tarareadas y escuchadas. Por ejemplo, ‘Billie Jean’, ‘My Sharona’ o ‘Layla’ (no es necesario decir de quién son), cuyas melodías forman parte de la cultura del siglo XX y cuyas letras se inspiraron en personas concretas

Uno de los títulos más vendidos, difundidos y escuchados de la historia de la música es, sin duda, el ‘Billie Jean’ de Michael Jackson. El talento del malogrado artista produjo muchos más temas de éxito, canciones que permanecerán y sonarán durante muchos años. En 1982 publicó el memorable ‘Thriller’ con, entre otras, la irresistible ‘Billie Jean’. Para entonces sus fans estaban más que entregados, llegando algunas veces a un fanatismo peligroso. Así, según biógrafos y expertos, Jackson escribió ‘Billie Jean’ a raíz del acoso de uno de sus fans. Su biógrafo Randy Taraborrelli siempre ha afirmado que  una fan empezó a escribir cartas al músico en 1981, señalándolo como el padre de su hijo; las misivas llegaban a diario a casa de Jackson, hasta que una vez en lugar de carta lo que le llegó fue un paquete con una pistola, cosa que (siempre según Taraborrelli) dejó al cantante muy preocupado. El productor Quincy Jones corroboró el origen de esa canción: “Michael Jackson me dijo que un día, al despertar, vio a la acosadora (que había saltado la valla de su casa) tumbada tranquilamente al lado de la piscina”. Sin embargo, el propio Jackson dejó escrito que ‘Billie Jean’ es “una combinación de personas, más relacionadas con mis hermanos que conmigo”; aunque es posible que dijera tal cosa tratando de no dar publicidad a la acosadora y deseando olvidar cuanto antes el acoso. Sea como sea, los versos del tema son muy explícitos.

¿Quién no ha cantado a voz en grito aquello de ‘My Sharona’? Aunque el nombrecito es raro hasta para EE UU, la inmortal canción con la que The Knack rompió las listas en 1979 se refería concretamente a una chica así llamada, Sharona Alperin, que durante unos tres años fue la novia de Doug Fieger, autor, cantante y guitarrista. De hecho es ella quien sale en la portada del disco. Según Sharona, “la sesión de fotos duró menos de diez minutos, y la foto elegida nos pareció entonces bastante provocativa porque se me ven los pezones a través de la camiseta; hoy eso no merecería ni comentarios”. Número uno en medio mundo aquel año, periódicamente reaparece y vuelve a funcionar tanto entre los añosos como entre los recién llegados. La protagonista declaró que hubo un tiempo en que sonaba tanto por la radio que al comenzar los primeros compases apagaba su receptor, pero “ya no me molesta aunque suene sin parar, además, ¿a cuántas personas les han escrito una canción tan emblemática y tocada por el éxito?”. Sharona Alperin también relata divertidas anécdotas: “Cuando alguien me presenta diciendo ‘esta es Sharona’, tres de cada cuatro dicen al momento, ‘My Sharona’, y el cuarto se nota que lo está pensando. Es muy divertido”. Hoy, la señora Alperin tiene una agencia inmobiliaria en California cuya web es, claro, mysharona.com.

Todo buen conocedor del rock y sus entresijos sabe que Eric Clapton escribió el inmortal ‘Layla’ (1970) pensando en la novia de George Harrison, Pattie Boyd, de la que estaba perdidamente enamorado. El riff que preside todo el tema pone firme a todo amante del rock, pero es en la letra donde Clapton se desnuda: “Layla, me tienes de rodillas, Layla te lo ruego, Layla ¿no aliviarás mi mente dolorida?” Patty Boyd era una modelo de la que se enamoraron Harrison y Clapton, amigos íntimos que, a pesar de todo, nunca dejaron de serlo. Y eso que las intenciones de Clapton siempre fueron muy claras, como indica la canción. La propia Pattie declaró: “Cuando comprendí que había inspirado tanta pasión y tal caudal de creatividad, no pude resistir más…, la canción me superó”. Y tuvo una aventura con el guitarrista, breve pero aventura. Luego, en el 74, Pattie se separó del ex Beatle, muy mujeriego, y cinco años después, en el 79, se casó finalmente con Clapton, para divorciarse (drogas, infidelidades) diez años después. Asombrosamente, a pesar de todo, George y Eric siempre fueron como hermanos: “Nunca pude entender cómo fueron siempre tan amigos y cariñosos el uno con el otro”. Claro que Harrison no iba a ser menos que Clapton, así que le escribió a Pattie otra canción inolvidable, ‘Something’.

Hoy se han ido a un plano más discreto, pero en 1982 Dexys Midnight Runners convirtieron en gran éxito su tema ‘Come on Eileen’, una trepidante pieza que combinaba folk celta, pop e incluso soul; escrita por el solista Kevin Rowland, nuevamente la canción se refiere a un chica, llamada Eileen claro, amiga de la infancia, compañera de iglesia y luego novia de Rowland. El caso es que ambos crecieron en una rígida comunidad católica, algo que se refleja en la letra, ya que habla de los sentimientos encontrados del adolescente que enfrenta su nacida sexualidad a unas creencias religiosas con muchas exigencias y culpas... El propio Kevin Rowland explicó: “Manteníamos una relación muy pura, pero cuando cumplimos los 14 ó 15 años el idilio empezó a ‘ensuciarse’…, y es lo que quise expresar en la canción, de eso trata”.

Hay algunas más que fueron enormes éxitos y que surgieron a partir de una persona concreta. Por ejemplo, ‘Donna’ (1958) de Ritchie Valens, hecha explícitamente para su novia adolescente, Donna Ludwig; tres meses después de su publicación, Ritchie Valens murió en aquel accidente de aviación (‘el día que murió la música), con sólo 17 años, sin ver el éxito que logró su ‘Donna’. Y es sabido que la deliciosa y eternamente atractiva ‘Hey Jude’ (1968) de los Beatles la escribió Paul para animar y dar esperanzas a Jules Lennon (inicialmente se iba a titular ‘Hey Jules), puesto que sus padres John y Cynthia Powel acababan de separarse.

CARLOS DEL RIEGO

miércoles, 20 de julio de 2022

LAS PROFECÍAS CLIMÁTICAS DE CIENTÍFCOS Y EXPERTOS JAMÁS SE CUMPLEN

 


Los adivinos climáticos predicen algo parecido a esto desde que empezó a hablarse de medio ambiente, pero nunca se ha cumplido ni una de sus profecías

Casi cada día aparece en los medios y redes sociales algún científico, un experto climatólogo o un especialista medioambiental anunciando graves catástrofes a unos pocos años vista. Como hacían hace siglos los profetas del apocalipsis, los estudiosos que se creen futurólogos predicen y auguran calamidades sin fin en todo el planeta, y ello a pesar de que todos los vaticinios hechos hasta la fecha se han revelado falsos, fraudes, mentiras

Nadie niega la contaminación del aire, tierras y aguas y, sin embargo, resulta difícil creerse todo lo que dicen las ‘voces autorizadas’ cuando tratan de predecir lo que ocurrirá dentro de unos años, muchos o pocos. La experiencia dice que no dan una, que cada vaticinio se convierte en una paparrucha, en una mentira, cuando se llega a la fecha indicada. La lista de embustes de científicos y expertos es casi ilimitada, por lo que resulta incomprensible que, a pesar de sus falsas predicciones, nadie les pida explicaciones; igualmente, la prensa que divulga las apocalípticas profecías con grandes titulares nunca dedica el mismo espacio a desdecirse.    

En fecha tan temprana como el 17 de noviembre de 1967, el diario Salt Lake Tribune tituló ‘Hambruna terrible en 1975’. En el texto explican que “según afirman biólogos de la Stanford University ya es demasiado tarde para el mundo para evitar un largo período de hambre, con su punto más destructivo y catastrófico en 1975”. De tal estupidez nadie dijo nada en 1975.

Un par de años después, el 10 de agosto del 69, el New York Times amenazó: ‘Todos desapareceremos en una nube de vapor azul en 1989’. La noticia se basaba en la afirmación del doctor Paul Ehrlig: “Todos desapareceremos en una gran nube de vapor azul en 20 años”. Buen arranque para una de serie Z.

También hubo quien pronosticó hambrunas letales. El Redlands Daily Facts publicó el 6 de octubre de 1970: ‘Estados Unidos padecerá racionamiento de agua en 1974, y racionamiento de alimentos en 1980'. Así lo anunció un reputado ecologista, el mencionado Ehrlig, quien avanzó que “La vida en el mar desaparecerá en menos de una década”. ¿Qué pensará cuando llega la fecha indicada y no se cumple su augurio?

 

A día de hoy el calentamiento global es una de las grandes preocupaciones, pero hace unas décadas era lo contrario: una próxima edad de hielo.

El Boston Globe proclamó el 16 de abril de 1970: ‘Los científicos predicen una edad de hielo a comienzos del siglo XXI’. El ‘experto James P. Lodge vaticinaba: “La polución del aire bloqueará el sol y se producirá una edad de hielo en el primer tercio del siglo XXI”, y también adivinó que “La demanda de agua secará los ríos y las aguas continentales”.

‘Se nos viene una edad de hielo’, tituló Washington Post el 9 de julio de 1971. El doctor S. I. Rassol, de la Columbia University, daba más datos: “En los próximos 50 años las partículas que dejan en la atmósfera los combustibles fósiles harán de pantalla que no dejará pasar los rayos del sol, con lo que la temperatura caerá hasta que nos veamos inmersos en una edad de hielo”.

El inglés The Guardian, en enero de 1974, insistía en la temida y próxima edad de hielo basándose en los informes e indicios que enviaban “Los satélites espaciales, que advierten del cambio del clima hacia una edad de hielo en el hemisferio norte”.

La Brown University pronosticó en 1971 una edad de hielo para 2070. El climatólogo Stehpen Sneider dijo en New York Times Book Review, el 18 de julio de 1976, que “el enfriamiento es ya inevitable”. El mismo diario neoyorquino amenazaba el 5 de enero de 1978: “Sin final a la vista la tendencia hacia el enfriamiento, que llegará en 30 años”.

Otros oráculos pronosticaban diversos tipos de calamidades para el futuro del planeta y sus habitantes. La NASA publicó en 1974: “El agotamiento del ozono ya es una serio peligro para la vida” (dice agotamiento, no agujero en la capa de ozono).

Según presagiaba France Press el 26 de septiembre de 1988, “Las Islas Maldivas estarán completamente bajo el agua en 30 años”; algo parecido se dijo de grandes áreas de ciudades como Barcelona o Benidorm… La agencia Associated Press amenazó el 30 de junio de 1989 con “Mares crecientes que 'borrarán' naciones en el año 2000”. Según The Independent, el 20 de marzo de 2000, “Los niños no sabrán qué es la nieve”. Y The Guardian decía el 21 de febrero de 2004: “Hambruna global en 10 años”.

Las profecías y adivinaciones, los augures y futurólogos vienen manipulando, engañando y burlándose del personal desde hace milenios, a pesar de lo cual siempre hay quien esté dispuesto a predecir el futuro, y cuando comprueba lo equivocado de su profecía, ya lo ha olvidado.

Personajes de gran fama también se han lanzado al mundo de la adivinación aprovechando la repercusión que tienen sus declaraciones. En 2008 el mamotreto de Al Gore advierte de que el Ártico se quedará sin hielo en 2013; después dijo que sería en 2014, luego la Nasa que en 2015, y la US Navy que para 2016. El príncipe Carlos de Inglaterra, en 2009: “solo quedan 8 años para salvar el planeta”. Otro que tal, Gordon Brown, primer ministro de Inglaterra en 2009, previó que quedaban “50 días para salvar al planeta de la catástrofe”.

Tonto sería ignorar o menospreciar los problemas de contaminación que sufre la Tierra, pero mucho más tonto es tragarse las trolas y presagios de los ‘científicos y expertos medioambientales’ convertidos en futurólogos. A los gobiernos y organismos poderosos les viene muy bien eso de amenazar y meter el miedo en el cuerpo a la población, puesto que son pretextos para arrebatar libertades, para controlar, para tener a todo el mundo bajo su yugo.

Hay que desconfiar de los que se creen adivinos aunque sean científicos.

 

CARLOS DEL RIEGO

domingo, 10 de julio de 2022

TAMBIÉN LOS BEATLES EMPEZARON POBRES


Año 1957, aun eran The Quarrymen y no tenían ni un chavo, pero poseían ilusión y talento

Todo comienzo conlleva dificultades y estrecheces, sobre todo si se es el primero en adentrarse por caminos totalmente desconocidos e inexplorados. Cuando aparecieron Los Beatles no había modelos de grupos de pop-rock, es decir, tuvieron que ir inventando soluciones según se presentaban los problemas, siempre nuevos. Y como es lógico, la falta de medios y recursos fue constante en sus primeros años, pues todos pertenecían a la clase trabajadora

No tardaron demasiado en convertirse en Los Beatles, pero antes de conseguirlo tuvieron que lidiar con la escasez a tirando de imaginación y una determinación que los llevó, incluso, a ofrecerse para tocar sin recibir nada a cambio. Como es sabido, George Harrison entró en The Quarrymen, que pasaron a llamarse Johnny and the Moondogs; según el libro de Joshua Greene ‘Here comes the sun’, el grupo tenía tales ganas de actuar que aceptaba cualquier actuación que se les propusiera, aunque no hubiera ni contrato ni paga: “Si el organizador se quejaba por la ausencia de batería, ellos alegaban que el ritmo estaba en las guitarras. Sólo querían tocar y estaban dispuesto a todo, aceptaban ir donde fuera y cuando fuera, pubs y pequeños clubes o locales improvisados”.  

 

Aún en su prehistoria, se fueron a una pequeña gira por Escocia, de la que volvieron con malas experiencias, pero experiencia al fin; entonces John rebautizó el grupo como The Silver Beetles. Allan Williams, propietario de un club, les dio una oportunidad: “La noche de su primera actuación George se me acercó y me preguntó si tenía un par de escobas; le contesté que el suelo ya estaba barrido…, se las dimos y esa noche descubrí para qué querían las escobas, y es que estaban tan escasos de dinero que no podían ni comprar los pies de micro, de modo que sus novias y amigos ataban los micrófonos a los palos de las escobas, se colocaban en primera fila y se los ponían a la altura para que cantaran…, y así estaban toda la noche”.

También fue Allan Williams quien los contrató para sus ya legendarias  actuaciones en Hamburgo, donde ganaban la ‘importante’ suma de 15 libras a la semana, pero la cosa se torció cuando la poli descubrió que George era menor de edad y tuvieron que volver a Inglaterra.

Una vez en Liverpool siguieron aceptando tocar donde fuera y a cambio de lo que se les diera. Y un buen día Brian Epstein se cruzó en su camino y cambió la historia de la música popular. Pero en aquel 1962, cuando planeaban sus primeras grabaciones, Brian vio que el grupo estaba muy falto de material e instrumentos. Dice la leyenda que en otoño del 62 George y John fueron juntos a una tienda de música de su ciudad llamada ‘Rushworth's Music House’, donde ambos quedaron enamorados de unas preciosas Gibson J-160 E, que costaban 161 libras cada una, un precio muy por encima de sus posibilidades. Brian se hizo cargo del pago como una especie de préstamo, aunque seguramente Epstein nunca les exigió que se lo devolvieran… George y John usaron esas guitarras hasta que a finales de 1963 algún indeseable robó la de Lennon, quien unos meses después se compró otra idéntica, esta vez sin que nadie le ayudara a pagarla.

Nunca más necesitaron financiación ni pasaron estrecheces, pero en sus inicios fueron tan pobres como casi todos los grupos que empiezan. Y es que la falta de medios no es problema si hay ilusión, constancia y talento.    

CARLOS DEL RIEGO

miércoles, 6 de julio de 2022

CASI 1000 HOMBRES QUE SE DICEN TRANS ESTÁN INGRESADOS EN CÁRCELES DE MUJERES EN EE UU, CON PREVISIBLES CONSECUENCIAS

 


Este asesino de mujeres se declaró transexual, así que lo ingresaron en una cárcel de mujeres con el previsible resultado, la violación de su compañera de celda

En Estados Unidos ya se habían producido casos de ‘prisioneras’ que dejaban embarazadas a compañeras de celda. Pero es que recientemente se ha sabido que hay casi un millar de hombres que, cuando el juez dictó sentencia de cárcel, afirmaron sentirse mujeres y, por tanto, exigieron ser ingresados en cárceles de mujeres. El disparate llega al máximo al comprobar que los jueces aceptan el novísimo ‘sentimiento’ sin más, de modo que envían al maromo a la cárcel de señoras con sólo decir que se siente tía, produciéndose los esperados abusos, violaciones, embarazos…, de los que son cómplices los jueces y todo el sistema judicial

Así es, en EE UU es suficiente que el delincuente condenado se declare mujer para que el magistrado lo envíe a una trena para féminas. Y son conocidos casi mil casos de tipos que han sido y ejercido de hombres toda su vida pero justo en el momento oportuno se han declarado señoras. Si se piensa, las cárceles de las delincuentes son menos duras y mucho menos peligrosas que las de los delincuentes, y además están llenas de mujeres, un entorno ideal para tiparracos violentos, sin escrúpulos morales y con escasa o nula conciencia. Asombra que el juez acepte el cambio brusco (y evidentemente falso) de identificación sexual, pero mucho más que haya medios y colectivos que aplaudan tal aberración sin considerar las terribles consecuencias.  

Evidentemente son las propias reclusas las principales perjudicadas. De hecho, la mayor parte de los criminales que cambian instantáneamente de opción sexual son asesinos, maltratadores e incluso violadores. Harmeet K. Dillon, el director de la organización de derechos civiles The Center for American Liberty, explicaba a la prensa estadounidense: “Sólo en las prisiones federales se han detectado más de 900 hombres biológicos ingresados en cárceles de mujeres, lo que ha provocado violaciones masivas, agresiones y todo tipo de agravios y conculcación de los derechos civiles de las reclusas. Y sucede a  diario”.

Pero la cosa aun va más lejos. Resulta que, según la ‘ideología de género’ (tan perversa y sectaria como todas las ideologías) exige admitir que hay muchas personas con “género flexible”; es decir, se da por bueno que un hombre se ‘sienta’ mujer justo antes de entrar en la cárcel y, por tanto, se le envíe a una de mujeres, pero cuando llega el momento de recuperar su libertad ‘la reclusa’ vuelve a sentirse hombre y se declara tal. Esto se llama, según el lenguaje ideológico, “género flexible”; aunque en realidad, es evidente, es incuestionable que no hay tal flexibilidad, sino puro oportunismo, pura burla del sistema gracias al apoyo de los dictadores de lo correcto y posesores de la única verdad admisible. Desconcertante es, asimismo, que el señor juez, llegado el momento, no exija nada que demuestre la nueva identidad femenina del delincuente, le basta con la palabra del criminal, el cual no precisa estar tratado, ni hormonado, ni operado…: puede ingresar en cárcel de señoras con todos sus atributos masculinos (más de uno delinquiría si tuviera la seguridad de que lo ingresarían en un maco para tías).

Es notorio el caso de todo un pedófilo confeso, Hobby Bingham, que se dijo mujer y pasó a llamarse Andromeda Love, con lo que el de la toga lo mandó con ellas; el resultado fue el previsto: abusó varias veces de su compañera de celda, una joven con trastornos siquiátricos. Al cumplir su condena salió y volvió a cambiarse el nombre y el género. Un guardia de la prisión, Scott Flemming, explicó a los medios que “para ser trasladado a una cárcel de mujeres en Washington el único requisito es que el recluso declare que se identifica y se siente una mujer”.

Preocupante, inquietante es el silencio de los-las feministas y adalides de la igualdad, que no dicen una palabra en defensa de todas esas mujeres abusadas por falsas mujeres en las cárceles de mujeres, al contrario, afirman que son mujeres los hombres que perpetran los abusos contra mujeres auténticas. No les da vergüenza defender que las reclusas se vean forzadas a compartir celda con violentísimos asesinos. De locos.

La Asociación Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU) insiste en que cualquier hombre, incluyendo depredadores sexuales, si se identifica como mujer deber ser enviado a una prisión femenina. Así, la ACLU presionó en Nueva Jersey para que se permitiera que las personas de sexo masculino que se identificaran como transgénero fueran alojados en prisiones femeninas. Esta medida entró en vigor tras una demanda de 2019. Desde entonces, al menos dos reclusas han quedado embarazadas de otros reclusos en ese estado.

 

Pero se sabe de un caso mucho más sangrante. Un pervertido llamado Perry Cerf se hace llamar actualmente Michelle Hel-Loki Angelina. En 2003 fue condenado a 75 años de cárcel por el asesinato de una mujer de 47 años, y admitió con gran satisfacción que la mató a patadas y le aplastó el cráneo, e incluso que bebió su sangre y le encantó. Pero llegado el momento dijo sentirse mujer e ingresó en un penal de mujeres, donde está registrado como Michelle. Si algún día sale de la cárcel, volverá a decirse hombre y nadie cuestionará nada. Y ningún medio de comunicación se atreverá a poner en duda las variaciones en su identificación sexual, pues sería objetivo a perseguir por parte de la inquisición ideológica de género. Y el día que salga, seguro que dará de puñetazos al que le pregunte si es él o ella, pues se dirá muy macho.

Esperpéntico, delirante.

CARLOS DEL RIEGO

domingo, 3 de julio de 2022

‘FANTASY MUSIC FESTIVAL’, 1967, CURIOSIDADES DEL PRIMER FESTIVAL DE ROCK DE LA HISTORIA


En el Fantasy de 1967, el primer festival de rock, se puso en práctica todo el catecismo hippie



Jim Morrison fue la estrella del festival

Con el verano llegan los festivales de rock, que en España son incontables y, seguro, en otras partes también. Hoy se ve el festival como algo corriente, pero en 1967 la música rock nunca se había atrevido a celebrar esa especie de congregación de fieles atraídos por los nuevos modos culturales que ofrecían los grupos de rock, convertidos casi en oficiantes. En junio de 1967 se celebró el primer festival, el que demostró que ese formato podía tener gran potencial aplicado a la nueva música

Fue en un paraje natural al norte de California y se llamó el Fantasy Fair and Magic Mountain Music Festival. Realmente la ocasión era muy oportuna, puesto que el llamado ‘verano del amor’ brotaba imparable en el movimiento hippie. El caso es que los medios airearon lo del festival de rock, que así se sumaba a la música folk o jazz, estilos que ya conocían el concepto de festival musical. Lógicamente, al ser el primero, al no tener ninguna experiencia ni previsión de lo que pudiera pasar, se sucedieron situaciones curiosas, disparatadas, sorprendentes.

El primer problema fue lo de la afluencia inesperada, puesto que aunque se dice que se vendieron unas 20.000 entradas (costaban dos dólares), se estima en más del doble los que, de un modo u otro, entraron y disfrutaron de los conciertos. Lógicamente los accesos quedaron rápidamente colapsados, quedando muchos coches donde se atascaron; la organización fletó buses escolares para llevar a músicos y público. Por allí pululaba la facción local de los Ángeles del Infierno, que se arrogaron la autoridad, como si fueran los encargados de la seguridad, aunque nadie los contrató. T. Rounds, uno de los organizadores, explicó: “Simplemente ese era su territorio y lo habíamos invadido. Nunca tuvimos intención de encargarles la seguridad, pero vimos que era mejor tenerlos de nuestro lado; se limitaron a mantener el orden”.

Además de música hubo infinidad de actividades y atracciones para los asistentes: ferias, concursos, puestos, disfraces, budas hinchables, recitadores de poesía antigua…, y drogas. Una fotógrafa que estuvo allí recordaba: “Vi a unos cuantos niños deslizándose colina abajo montados en trozos de cartón y, casi al lado, en un bosquecillo, una gran humareda, puesto que todo el mundo estaba fumando marihuana. Pero lo increíble es que había muchos policías que, incomprensiblemente, no prestaban la mínima atención, les daba igual. Esto no había ocurrido antes”.

El cartel del ‘Fantasy F estival’ era variopinto y de lo más atractivo: The Doors, Jefferson Airplane, The Byrds, Canned Heat, Stevie Miller Band, Dionne Warwick, The Chocolate Watch Band, Captain Beefheart, Country Joe & The Fish y muchos otros grupos y solistas con menos renombre, 34 en total.

The Doors fue, desde su nacimiento, una convulsión. El bajista y guitarrista de The Byrds John York quedó pasmado ante Jim Morrison: “Pensé que era casi más teatro que música; Jim era como Macbeth, o como Hamlet…, había creado su propio personaje y su atractivo era tal que todo el mundo estaba pendiente de lo que iba a pasar, de lo que iba a hacer a continuación”. Pero el caso es que Jim Morrison estaba como casi siempre, muy borracho, según cuenta un crítico (J. Selvin): “Estaba que no se tenía en pie (todos estábamos colocados). En un lado del escenario había un poste de luces, Jim se agarró, se balanceó y desapareció…, se había caído del escenario. La música seguía y él debió despejarse con la caída, puesto que volvió y terminó la canción como si no hubiera pasado nada”.

The Byrds también tienen anécdota que contar de aquel primer festival de rock. Llegaron sin su batería, Michael Clark (despedido meses después), así que necesitaban uno urgentemente. Entonces se presentó un pipa, un tramoyista que decía saber tocar. El mencionado John York contó: “Apareció un operario que no tenía la menor idea de quiénes éramos ni conocía las canciones, pero dijo que sabía tocar. Le preguntamos si tenía baquetas y contestó que no, así que fue corriendo a los camerinos (un camión) a ver si encontraba alguien que se las dejara; al no encontrar a nadie, rompió las patas de una mesita de café y con esos dos palos tocó la batería. No sabía qué tocaba, el tipo simplemente llevaba el ritmo según le parecía… ¡Y nadie dijo nada, nadie notó nada!”.

La actuación de Captain Beefheart fue… alucinante. Sólo estaban en la segunda canción cuando Don, nombre del Captain, se quedó ‘colgado’ a causa del mucho LSD ingerido (llevaba meses metiéndose). El batería, John French, recuerda aquel momento: “Vi su rostro de terror, se dio la vuelta y caminó al final del escenario hasta caer. Debía estar en pleno (mal) viaje. Luego me dijo que se había quedado mirando fijamente a una chica que, de repente, se convirtió en un pez de cuya boca salían burbujas…, entonces Don se asustó y corrió sin saber a dónde”.

La marihuana y el LSD habían conquistado a los hippies, tanto a los músicos como a la creciente legión de afiliados al nuevo movimiento. Todos los recuerdos, noticias e informes apuntan a que las drogas se consumían y circulaban continuamente por todo el festival, incluyendo el escenario. “Todo el mundo, todos se metían…, al menos ácido (afirmó un integrante de Salvation, uno de los grupos menos famosos que tocaron allí); era el Verano del Amor…, yo ni siquiera me acuerdo de cuando tocamos”.

A pesar de que fue el primer festival de la historia del rock, el Fantasy Music Festival ha sido casi olvidado, tal vez porque apenas una semana después se celebró el Monterrey Pop, que tantas imágenes legendarias dejó. Y en 1969 llegó Woodstock. Pero el primero, el que antes se aventuró por algo tan desconocido como un festival multitudinario al aire libre, fue el Fantasy. “Cuando llegó Monterrey Pop ya sabíamos qué era un festival de rock y lo importantes que éramos por estar allí”, dijo la cantautora Penny Nichols. Un rasgo exclusivo del primer festival es que los músicos se sentaban en la hierba a compartir porros con el público sin agobios: no había ‘back stage’; “cuando no estabas actuando pasabas a ser parte de la audiencia” (J. Kaukonen). Pero a la siguiente ocasión (Monterrey Pop) eso se corrigió para siempre.

CARLOS DEL RIEGO