Pocos bajistas son tan reconocibles como Dusty Hill
Una de las barbas más
famosas del universo del rock es la de Dusty Hill, el eterno bajista de ZZ Top,
quien nunca más lucirá en escena sus frondosas pilosidades faciales. Peor,
nunca volverá a encajarse en esa maquinaria tan sólida, engrasada y siempre a
punto que integraba junto a sus colegas Gibbons y Beard. Hill siempre recordó
sus primeros años en la banda con algunos episodios sorprendentes, divertidos
Dusty ha muerto joven,
72, a pesar de llevar más de medio siglo aportando densidad, profundidad y granito
al trío texano, que alcanzó el triunfo multitudinario en los ochenta y lo
mantuvo hasta el final gracias, en parte, al barniz de grupo legendario que le
proporcionó el hecho de proceder de los sesenta. Hacia el 67 Hill y Beard, que ya eran
compadres (así, en español, como les gustaba llamarse) suplantaron a un grupo
inglés de éxito sin que nadie sospechara; y diez años después Hill dejó de ser
estrella del rock para transportar maletas en un aeropuerto, temporalmente.
Dusty Hill y Frank
Beard representaron una farsa en los años 60 que hoy no sería posible. Resulta
que cuando los británicos The Zombies triunfaron en EEUU con el tema ‘Time of
the season’ (1967), este germen de ZZ Top formó un grupo llamado también The
Zombies, con la particularidad de que se presentaban vestidos de zombis y
ejecutaban el repertorio de The Zombies; y así, haciéndose pasar por los
auténticos y disfrazados de muertos vivientes, dieron un montón de conciertos
por varios estados con gran éxito. Lo más sorprendente no es la ‘jeta’ de Hill
y Beard, sino que en el sello discográfico de los ingleses en Estados Unidos sabían
de la gran acogida que estaban teniendo los zombis (los falsos), pero como no
tenían ni idea de cómo eran los verdaderos, pensaron que eran estos, The
Zombies, quienes estaban girando por EU. Aún más increíble: los zombis
impostores seguían usurpando la personalidad de los ingleses un año después de
que los auténticos The Zombies se hubieran separado (1968). Dusty Hill recordó
muchos años más tarde: “Eran los años 60 y cosas así podían pasar; un grupo
inglés podía ser famoso en EEUU y no enterarse, y también que sus fans
estadounidenses no tuvieran idea de cómo eran sus integrantes”. Los 60, siempre
los 60.
Unos ocho años
después de su formación, ZZ Top había sentados bases para el rock duro, el rock
sureño, el blues-rock, con cinco álbumes de enorme calibre. Y sus giras no
terminaban nunca, por lo que es comprensible que Hill y sus amigos (en español,
como siempre que hablaban de ellos) Gibbons y Beard estuvieran agotados e
incluso saturados de tanto curro. En 1977 decidieron darse un respiro, que
duraría más de dos años en los que cada uno hizo cualquier cosa menos música; El
guitarrista y el batería optaron por largos viajes, mientras que Dusty Hill quiso
sentirse una persona ‘normal’, no una estrella del rock, como declaró en 2019:
“Puedo decir que he sido músico desde los trece años y desde entonces nunca he
dejado de viajar, tocar, grabar. El caso es que tenía un amigo que trabajaba en
el aeropuerto de Dallas ‘Fort Worth’, y me enteré de que había trabajo allí, así
que me presenté y acepté una faena de lo más corriente. Entonces sólo quería
sentirme una persona normal”. Y allí trabajó un tiempo como un empleado raso.
También explicó que pretendía que ese empleo lo devolviera a la realidad: “No
quería que la gente pensara que yo me creía ‘lleno de mí mismo’, aunque lo que
de verdad deseaba era no sentirme así, ‘lleno de mí mismo’. Lo hice para poner
los pies en el suelo”.
En 1973, tras el
éxito de ‘Tres hombres’ y sobre todo ‘La Grange’, tocaron como teloneros de los
Rolling Stones. Dusty recordaba: “El público gritaba, nos miraba boquiabierto,
enloquecía, nos pedía más. Entonces vimos a los Stones que nos miraban con cara
seria, como recordánonos que ya teníamos que haber acabado y dejar paso al
grupo principal”. El entusiasmo del personal es lógico, ¿quién se resistiría a
‘La Grangre’ en vivo?
Dusty Hill siempre
fue un tipo muy discreto fuera del escenario: “He pasado malos momentos en mi
vida, pero nunca hablo de ello en público, no son para que la gente los revise
y los analice”. Y cuando le hablaban de la longevidad y estabilidad de ZZ Top,
él respondía: "Parece un tópico, pero los tres siempre encontramos muy
divertido y excitante tocar juntos, por eso seguimos”.
CARLOS DEL RIEGO
No hay comentarios:
Publicar un comentario