SERIES DE
TELEVISIÓN.
TENDENCIA A LA MEDIOCRIDAD
SUPERAGENTE 86 |
Es la época dorada de las series de televisión. No hay cadena que no emita diariamente cuatro, cinco, seis, tanto de elaboración propia como de producción ajena. Unas tienen mejor manufactura o diálogos más imaginativos, mientras que otras son más limitadas de medios y de ingenio; hay comedias de situación de todo tipo y en todos los escenarios, hay series de policías bajo todos los prismas posibles, las hay de ambientación fantástica y también situadas en diversos períodos históricos, de tema político, de abogados y juicios, para adolescentes y para jóvenes..., y así se podría seguir unas cuantas líneas más, pues todas las televisiones del mundo guardan las mejores horas para las series, o directamente tienen un canal dedicado exclusivamente a emitirlas.
CSI |
Sin embargo,
pasados unos cuantos capítulos, todas ellas (prácticamente sin excepción) se
convierten en culebrones, puesto que al poco de iniciarse, las ideas de quienes
las escriben se van agotando, por lo que empezarán surgir todo tipo de relaciones
personales entre los protagonistas, nacerán líos amorosos entre ellos, se
descubrirán pasados terribles, aparecerán ex maridos y ex mujeres, hijos
escondidos y olvidados, hermanos delincuentes, padres maltratadores..., con lo
que la trama de las relaciones personales termina por imponerse a la base
argumental con que se inició la serie. Y de este modo se llega al culebrón, a
la telenovela, cuya oferta es precisamente el lío amoroso, el engaño y los
cuernos, el odio, la venganza y la ambición, todo ello dentro de un escenario
en el que continuamente se van produciendo increíbles vaivenes del destino.
Las series
televisivas de la actualidad pierden muy pronto su esencia, puesto que
rápidamente empiezan a utilizar recursos de telenovela, cosa que, por otro
lado, suele dar buenos resultados entre el público, pues al igual que en el
culebrón, la audiencia termina por hacer más caso al cotilleo que a la propia
intriga del serial.
Por otro lado,
cuando el ingenio empieza a escasear, cuando lo que se quiere contar no pasa de
la vulgaridad, cuando la mediocridad toma el sitio de la sutileza, cuando las
buenas ideas desaparecen, todas las series recurren al sexo y/o violencia, que
son las principales agarraderas de los guionistas, directores y productores
mediocres, incluyendo los dedicados a la publicidad (véanse los anuncios de
perfumes en Navidad, prácticamente todos con sexo más o menos explícito).
LOS SIMPSON |
Muchas series
antiguas derrochaban inteligencia fueran del tipo que fueran (también las había
muy malas), ofrecían argumentos y guiones que consiguen que se puedan ver en
cualquier tiempo con agrado. Así ‘Misión Imposible’, ‘El fugitivo’, ‘Bonanza’,
‘Los invasores’, ‘El túnel del tiempo’, ‘Kojak’, ‘McMillan & wife’,
‘McCloud’, ‘Colombo’..., y cómo no, la excelente ‘Superagente 86’ . Mientras, algunas emitidas
en los últimos años llegan a causar sonrojo, empezando por series españolas
ubicadas en épocas pasadas en las que los personajes hablan como si lo hicieran
por el Twiter y donde el sexo (sobre todo) y la violencia son su único
objetivo, y continuando por las centradas en el universo adolescente y las
comedias, que ofrecen guiones sobadísimos y salpicados de contradicciones
irrisorias, actores francamente malos, situaciones ridículas, gags previsibles...
Pero las americanas (se emiten pocas de otras procedencias) también caen hoy en
el recurso fácil al sexo y/o violencia.
La causa es
que, desgraciadamente, la mediocridad, la vulgaridad, lo grosero, tiene muchos
seguidores, y por ello los que escriben no tienen por qué pasar de ahí. Es más
fácil de hacer y de vender. Afortunadamente, a pesar de todo, hay una serie que
lleva décadas derrochando ingenio, chispa y personalidad, y eso que sus
personajes tienen cuatro dedos y son amarillos.
Carlosdelriego.
Joder Carlos que el mejor cine se hace actualmente en la tele; sirva un ejemplo:
ResponderEliminarMad Men
Los Soprano
The Wire
Carnivale
Breaking Bad.........
No te lo niego, pues el cine de hoy es basura, videoclips muy caros. Y tampoco te niego que esas series sean buenas, pero es que cuando me pongo ante una nueva encuentro muchos tópicos, muchas situaciones fácilmente predecibles, muchas expresiones repetidas, mucho chulillo..., y por eso me he retirado de las series excepto Los Simpson. Sé que tiene que haber series muy buenas (todos elogian esas que mencionas), pero me da mucha pereza perder el poco tiempo que veo la tele en una serie, prefiero documental (de naturaleza, historia, política, ciencia...); qué le vamos a hacer. Un abrazo
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