Sí, Paul McCartney es el músico de rock más rico del mundo, y con diferencia
Cuando uno inicia su carrera
artística, sea música rock o cualquier otra disciplina, piensa más en expresar
su talento, sus condiciones y habilidades que en el dinero. Pero en poco tiempo
todos quieren que el esfuerzo creativo se valore y se pague. Es sabido que la
música rock puede dar mucha pasta a unos pocos, buena remuneración a muchos y
poca cosa a otros tantos. Lo que todos los que trabajan en el planeta rock
desearían (y quien diga lo contrario miente) es entrar en la lista de los que más
ganan
Aunque se puede pegar el bombazo
puntual, realmente quienes más gordas tienen las cuentas bancarias son los que
llevan muchos años en este negocio manteniendo siempre la atención y el favor
del gran público, algo verdaderamente difícil. Por eso, los más millonarios son
músicos ya entrados en la tercera edad, con décadas de carrera a sus espaldas
y, sin la menor duda, después de mucho, muchísimo trabajo. Venta de discos,
dividendos por derechos de autor, giras, publicidad y patrocinios,
inversiones…, a las grandes estrellas el dinero les llega de todas partes. Las
cifras son estimativas y, además, a todas puede añadírsele eso de ‘que se
sepa’.
Los que ‘menos’ tienen de la lista de
los que más han ganado con esto del rock & roll están en torno a los 400
millones de dólares. Por ejemplo Eric Clapton, que empezó a ganar dinero don The
Yardbirds, luego con Cream, después con Blind Faith y, por último, en
solitario; el caso es que ‘Mano lenta’ es posesor de una fortuna que roza los
450 millones; claro que habrá quien diga que valen más los 18 premios Grammy o
sus tres entradas en el Salón de la Fama del Rock and Roll. Cifra similar
atesora Jon Bon Jovi, más o menos lo mismo que Gene Simmons de Kiss, Adam
Clayton, The Edge y Larry Mullen de U2, Lars Ullrich de Metallica (que gana más
que sus compañeros porque parece ser un águila invirtiendo), Phil Collins o el
beatle Ringo Starr. Todos ellos amasan cifras entre los 400 y los 450 kilos.
The Rolling Stone siguen en activo, lo
que quiere decir que Jagger y Richards, los ya octogenarios líderes de la banda,
continúan incrementando sus números. En todo caso, a pesar de sus vidas de
excesos, de divorcios millonarios y de derrochar a manos llenas durante
décadas, la eterna pareja ‘sobrevive’ con 500 millones por barba.
Cantidad muy similar a la que muestran
las cuentas de Bob Dylan, aquel jovencito que reflexionaba sobre las
profundidades humanas acompañado de guitarra y armónica, que luego se enredó
con las religiones, probó todos los estilos y que ha terminado de gira
continua, como si su vida dependiera del directo y si se detuviera palmara. El
único músico de rock que puede presumir de Premio Nobel tampoco vive en
precario gracias a sus 500 kilos.
Algo más ha ahorrado Gordon Sumner,
Sting, quien ganó mucho con Police, pero más aun a lo largo de prolífica
carrera en solitario. En total sus millones sobrepasan los 550.
Elton John tampoco tendrá que recurrir
a la pensión de la seguridad social inglesa, puesto que desde el ‘Crocodile
rock’ hasta hoy ha vendido hasta lograr beneficios superiores a los 650
millones de dólares, bonita cifra que viene adornada por todo tipo de
distinciones, desde Grammys y Oscars hasta títulos del tipo de Caballero de la
Orden del Imperio Británico…, Sir Elton John.
Bruce Springsteen lleva también toda
una vida en el escenario y publicado más de veinte elepés; y sus conciertos son
algo especial, puesto que nunca se sabe cuánto tiempo se va a pasar The Boss en
escena. Sin duda se merece sus alrededor de 650 millones.
El cantante solista de U2, Bono, que
rara vez deja de estar de actualidad, cifra su patrimonio en unos 700 kilos
(hay quien afirma que tiene mucho más), dejando muy atrás a sus compañeros de
banda. Y eso que el también caballero de la Orden del Imperio se pasa gran
parte del tiempo en actos de índole política y benéficos.
Pero el músico de rock más rico del
planeta es (no podía ser otro) Paul McCartney. El grupo de su vida, Beatles,
sigue produciendo tal cantidad de beneficios que la mayoría de profesionales de
este negocio jamás se acercarán a esas cifras. Y luego su carrera con Wings y
en solitario y sus multitudinarios conciertos (en los que se venden todas las
entradas de un estadio en minutos); todo ello coloca al gran Macca en la cima
de los más ricos, pues su hacienda se eleva hasta los 1.200 millones de
dólares.
Sí, Sir Paul (que también puede
presumir de todas las distinciones y nombramientos) es el más rico con gran
diferencia. Aunque la mayoría de los presentes se conformaría con tener en su
cuenta corriente la décima parte del más ‘pobretón’ de todos estos.
CARLOS DEL RIEGO